A pesar de ser abogado, los asuntos jurídicos no parecen ser el fuerte del alcalde de Izúcar de Matamoros, Rubero Galileo Suárez Matías, quien esta semana sufrió un nuevo revés: el Tribunal de Arbitraje de la Secretaría del Trabajo rechazó la toma de nota para la creación del sindicato de trabajadores de ese ayuntamiento.
El principal argumento del tribunal fue que éste carecía de intención para beneficiar a 450 empleados municipales; a pesar de ello y de que no había sido autorizada la creación del gremio de trabajadores municipales, el edil y el secretario del ayuntamiento Miguel Ángel Velásquez Trejo autorizaron el cobro de “cuotas sindicales” que van de los 80 a los 200 pesos.
Quienes se opusieron al cobro de cuotas simplemente fueron despedidos; se sabe de al menos 20 casos. Desde julio pasado comenzaron a ser descontadas esas cuotas vía nómina. A la fecha se desconoce el monto total que se obtuvo y el destino de ese dinero.
La creación del sindicato daría a Suárez Matías control sobre los trabajadores a fin de seguir interfiriendo en las actividades del ayuntamiento durante los siguientes gobiernos, particularmente en el siguiente que encabezará Carlos Gordillo, confiaron fuentes cercanas al propio edil.
Por ejemplo, como secretario general del sindicato fue “nombrado” Martín Espinobarrios Crisanto, quien es el actual director de Servicios Públicos del ayuntamiento y es cercano a Suárez Matías; este hombre es quien tiene a su cargo a un importante número de trabajadores de los servicios de Limpia, Alumbrado Público, Comercio y Abasto.
En tanto, el director de Desarrollo Económico del ayuntamiento, Oswaldo Ramírez Martínez, sería el secretario de Trabajo y Conflictos, esto por mandato del edil. Ramírez fue destituido de la Dirección de Seguridad Pública a principios del trienio, y tras el estallido de agroquímicos en la fábrica Dragón el 24 de marzo pasado, también fue destituido de la Dirección de Protección Civil municipal.
En julio pasado el secretario del ayuntamiento Velázquez Trejo solicitó la toma de nota ante la Secretaría del Trabajo del estado de Puebla, la cual fue rechazada unas semanas después; este hombre se presentó ante la dependencia como “asesor legal y jurídico” del nuevo sindicato, y en ese tenor decidió recurrir al Tribunal de Arbitraje para que el gremio fuera reconocido.
Tal era la confianza del presidente municipal y de su secretario que incluso del dirigente de la CTM local, Leobardo Soto, anunció la incorporación del sindicato izucarense a sus filas, pero el 28 de octubre pasado el magistrado Pedro Jiménez y González rechazó por completo la toma de nota por carecer de beneficios para los trabajadores.
Es el segundo revés jurídico que sufre el alcalde Suárez Matías y su gobierno en menos de una semana, pues este jueves se confirmará que la empresa Agricultura Nacional, propietaria de Dragón, será amparada por la justicia federal debido a los yerros del alcalde y sus asesores.
