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Puebla > Estado
jueves 12 de abril de 2007

ESTÉTICA Y SALUD

Los pies y el profesional de la salud

Rafael H. Pagán Santini

Cuando hablamos de la estética y de la salud de los pies debemos ser muy cuidadosos al identificar problemas que requieran la intervención de los profesionales de la podología o de la ortopedia. Los podólogos son especialistas en enfermedades de los pies, tratan los problemas médicos del pie en su estática y en su dinámica. Si usted presenta algún tipo de lesión como el papiloma plantar, o alguna deformación o trastorno en la marcha debe recurrir alguno de estos dos tipos de especialistas. Los centros de estética sólo brindan un tratamiento higiénico.

Un ejemplo de esto son los “juanetes”, algo muy frecuente y que soportamos con resignación sin saber que hay alivio para este padeciendo de los pies. Aunque, el nombre juanete está aceptado dentro de la terminología médica, científicamente se le denomina Hallux Valgus (de hallux, dedo y de valgus, hacia afuera). Al examinarse puede verse la angulación del dedo gordo del pie a nivel de la articulación metatarsica–falánge. Anatómicamente hay un engrosamiento del hueso que forma la articulación que se acompaña con la formación de un cayo en la piel de esta zona.

La mayoría de los juanetes aparecen en personas que tienen el pie tipo egipcio (el dedo gordo más largo que los demás dedos del pie). Además, esta deformidad frecuentemente se asocia a un pie plano hipermóvil. Cuando existe una predisposición anatómica como la que estamos señalando se debe evitar el uso de zapatos de tacón alto y estrecho, el uso continuo constituye un importante factor de riesgo que puede precipitar la aparición de este tipo de lesión en el pie.

Otro tipo de afección que ataca comúnmente a los pies es la hinchazón, término médico, edema. El edema es la presencia de líquido excesivo en los tejidos que rodean los vasos sanguíneos y, por lo tanto, fueran también de los vasos linfáticos. Es importante entender que el edema es una señal de que algo no está funcionando bien o de que se ha insultado al cuerpo y, por consiguiente, este se ha inflamado. El masaje está indicado para eliminar cualquier líquido del cuerpo, pero su utilidad puede quedar restringida ante la complejidad de los mecanismos que conducen a la formación del edema.

La mayoría de las veces nos adaptamos a nuestras molestias y sólo pedimos ayuda profesional cuando éstas nos incapacitan. Por lo general, cuando esto ocurre, el daño en nuestro organismo ya se ha hecho crónico y a veces es irreversible. Para explorar el edema debemos comprimir suavemente los tejidos con el pulgar o cualquier dedo y mantener la presión durante cinco segundos aproximadamente. Si hay edema, la presión producirá un hundimiento o depresión en la piel que persistirá después de retirar el dedo. Cuando se hinchen sus pies, observe si ocurre en los dos pies, vea si sus manos también están hinchadas, tome nota de a qué hora más frecuentemente se forma el edema y si ocurre después de alguna actividad. Toda esta información es fundamental para ayudar a su médico a encontrar la causa de la formación del edema.

Los padecimientos más frecuentes que producen la formación de edema en los miembros inferiores son la insuficiencia cardiaca y la insuficiencia renal, pero hay situaciones tan comunes como el permanecer mucho tiempo de pie o sentado que también producen la formación del edema en ambos pies. Son situaciones extremas donde el ojo profesional es la mejor ayuda. Para prevenir situaciones más complicadas en un futuro, debe buscar la evaluación de un médico.

Cuando las causas lo permitan, el masaje ayuda a drenar la linfa mediante el empuje mecánico del líquido desde los vasos superficiales hacia los profundos. Además, las contracciones de los vasos linfáticos bombean a la linfa ayudándola a drenar, contracciones que se consiguen por vía refleja gracias al masaje. Uno de los efectos inmediatos de este tipo de masaje es el poder disminuir el edema que aparece alrededor de los tobillos después de una estancia prolongada en pie; otro ejemplo es el edema de las rodillas por sobreuso.

Como vemos, hay situaciones donde la intervención oportuna del especialista en la materia es fundamental para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. La higiene y la salud de nuestros pies son requisitos sin los cuales no podrían estar bellos.

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Los masajes de piedra caliente y fría ayudan a combatir el estrés, opina cosmetóloga

Lo más revolucionario en salud y belleza actualmente, son los masajes con piedras calientes y frías sobre la piel, que combaten el dolor, relajan y ayudan a recuperar el sueño, además de revitalizar, iluminar y oxigenar algunas partes del cuerpo como los pies.

De acuerdo con la cosmetóloga Adriana Herrera, las piedras llegan desde China, Japón, Arizona y Hawaii, y su calor y poder magnético combinados con un masaje revitaliza, produce energía y oxigena la piel de todo el cuerpo.

“Esta terapia –explicó– es una combinación de piedras calientes de lava basáltica y piedras frías de mármol, que se aplican sobre puntos determinados del cuerpo y se usan para masajear zonas especiales”.

Durante una sesión, comentó que se colocan piedras sobre los puntos energéticos del organismo como son a lo largo de la columna vertebral, el abdomen, la frente, las manos y los dedos de los pies, sin olvidar una piedra pequeña sobre el tercer ojo, situado en el centro de la frente.

El masaje con piedras calientes y frías no es nuevo, la dinastía china Chang ya usaba piedras con fines terapéuticos; los romanos tras un baño caliente se tumbaban sobre mármol frío para disminuir los dolores y relajarse; las indias de América se colocaban piedras calientes sobre el vientre para aliviar dolores menstruales y con esta misma técnica los monjes japoneses favorecían el ayuno.

Las piedras calientes son rocas volcanicas y de marmol

Sobre las piedras calientes, la cosmetóloga informó que son rocas volcánicas que cuanto más oscuras son mayor es su contenido de hierro y más tiempo retienen el calor, lo que hace que aumente su poder magnético y por lo tanto sus bondades, entre las que destaca la dilatación de los vasos sanguíneos y linfáticos.

En caso contrario, las piedras frías suelen ser de mármol y entre sus propiedades se encuentran mejorar el la firmeza de la piel, además de conseguir una relajación total.

Generalmente, durante la terapia o masaje con piedras, se usan más de 60 rocas diferentes, que alcanzan los 60¡C sin quemar la piel.

Se combina la técnica del masaje tradicional con las manos y la colocación de piedras calientes para dilatar los vasos sanguíneos y linfáticos y estimular la circulación, así como rocas frías para conseguir la relajación. Las primeras se calientan en un horno y las segundas se enfrían en el congelador o con hielo.

Entre los beneficios citó: alivia el dolor crónico, desintoxica el cuerpo, ayuda a los malestares de la espalda y el cuello, induce al relajamiento y reduce el estrés, y tiene efectos similares de un masaje profundo en menos tiempo.

Según Herrera Castillejos, también especialista en métodos de relajación, el elemento fundamental de esta terapia conocida como geotermal o hot stone, lo constituye la aplicación de piedras que actúan a dos niveles: el estático y dinámico, de acuerdo a la temperatura y color de las rocas.

Agregó que tiene conexiones, además, con la acupuntura, el reiki, y con el empleo de los chacras como cauce para restablecer el equilibrio energético.

Al finalizar terapia, la cosmetóloga recomendó beber agua en abundancia para reponer los líquidos y las sales minerales perdidas con la sudoración, ya que el masaje suele durar una hora aproximadamente, con la posibilidad de permanecer tendida durante media hora más sobre la camilla para completar la relajación. (Yadira Llaven)

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