Los socios de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) sacrificarán entre 3 y 4 por ciento el margen de utilidad este año, a efecto de no salirse de un rango razonable en el ajuste al precio de las viviendas por enfrentar el alza entre 5 y 10 por ciento en el costo de los materiales para construcción, informó el presidente seccional en Tlaxcala, Leonel González Martínez.
Especificó que los desarrolladores inmobiliarios ajustaron los precios de las viviendas en un porcentaje menor al 6.77 por ciento del índice inflacionario con que cerró 2017 en el país, pues la mayoría de las casas que colocan reciben subsidio de la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi) y no pueden salirse de un monto máximo.
En 2017 el monto máximo fue de 362 mil pesos y se prevé que en 2018 será en 370 mil pesos en la vivienda económica, mientras que los inmuebles de mayor valor tendrían un aumento en su precio de entre 5 y 10 por ciento este año, por lo que el margen de utilidad se reducirá entre 3 y 4 por ciento por el alza en el costo de los materiales para construcción como el cemento y el acero.
No obstante, dijo que las expectativas son halagadoras para 2018, a pesar de que es un año electoral, pues las ventas han repuntado en los primeros 15 días de enero por lo que quedó pendiente en diciembre pasado. “Al parecer ese es un indicativo para que sea bueno este año”, agregó en entrevista.
El año pasado, los socios de la AMPI vendieron alrededor de 300 viviendas, “lo cual es bueno para el sector si bien 2017 fue un año malo para la sociedad en general”. Precisó que el 80 por ciento de los inmuebles que se colocan son nuevos y el 20 por ciento usados en el estado de Tlaxcala.
Indicó que se vendió la vivienda que estaba rezagada de 2016 y el año pasado se hicieron nuevos asentamientos en Apizaco y Yauhquemehcan, donde se construyeron dos fraccionamientos de departamentos y “eso quiere decir que se empezó a reactivar el sector”.
Leonel González hizo un recuento de que en diciembre se habían quedado alrededor de 50 créditos en tubería, esto es, en lista de espera para su venta, pero en este inicio de 2018 se están acabando de formalizar.
En cuanto a las metas para 2018, el dirigente seccional de la AMPI dio a conocer que se esperan vender 500 casas a través de créditos del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), el Fondo de la Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Fovissste) y de instituciones bancarias.
Indicó que tradicionalmente el 50 por ciento de las viviendas vendidas por la AMPI son a través de créditos del Fovissste, el 30 o 35 por ciento del Infonavit y el porcentaje restante de instituciones bancarias.