Más que con leyes, la violencia escolar debe resolverse con información para detectarla, abordarla, prevenirla y reducir la incidencia, aseveró Raúl Plascencia Villanueva, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
El ombudsman nacional visitó el estado de Tlaxcala, donde entregó al secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Juan Díaz de la Torre; al gobernador Mariano González Zarur y a autoridades educativas, un protocolo de actuación a efecto de que las escuelas sean libres de bullying.
En entrevista, dijo que “la idea es que podamos reducirlo al mínimo, pero evidentemente lo ideal sería desaparecerla; por lo menos que la reduzcamos, que se pueda identificar, que se pueda abordar bien y generar un entorno de tranquilidad, de seguridad en las escuelas, como debe de ser”.
Expuso que había desconocimiento sobre la forma de proceder cuando se registra un caso de violencia dentro de una escuela o fuera de la misma entre los alumnos. De ahí que subrayó que el protocolo servirá a los estudiantes, docentes, padres de familia y autoridades.
El presidente de la CNDH puntualizó que el bullying es más un tema educativo que de ley, de cómo abordarlo, por ello la necesidad de elaborar un documento de este tipo, de manera conjunta con el SNTE.
“Yo diría que no volteemos la mirada a reforma legales sino más bien hacia cómo difundir los derechos humanos y cómo enseñarle a profesores, alumnos y padres de familia cómo prevenir, abordar e identificar la violencia escolar, en el hogar y en la calle”, anotó.
Resaltó la relevancia del acto, pues aseveró que permite generar una mayor conciencia en torno al tema de los derechos humanos de manera conjunta con profesores y el gobierno estatal.
Raúl Plascencia sostuvo que la CNDH estará pendiente de que el contenido del protocolo se conozca ampliamente por parte de alrededor de 350 mil profesores del país que reciben capacitación.
En el caso de Tlaxcala existe un reto importante, pero aseguró que la Comisión Estatal de Derechos Humanos /CEDH) ha encontrado disposición y voluntad, por lo que continuarán los trabajos e investigaciones para superar esta problemática.
En otro tema, el ombudsman señaló que la CNDH ha monitoreado la situación de niños migrantes centroamericanos, por lo que afirmó que hasta ahora “son pocos” los que han sido retornados a México, pero que la condición de los miles que se encuentran en territorio estadunidense tendrá que arreglarse entre esa nación y las de origen de esos pequeños.
En este tipo de asuntos, el presidente de la Comisión puntualizó que se deben respetar todos los protocolos de protección y convenciones a favor de la niñez para que se reencuentren con su familia y, sobre todo, evitar que sean criminalizados.
Recordó que el aseguramiento de infantes en Estados Unidos creció en forma exponencial, pues hace cinco años eran 6 mil anualmente y actualmente la cifra es de cerca de 60 mil, “y eso es lo que ha venido agudizando esta problemática”.
En cuanto a México, Raúl Plascencia dijo que se registra el regreso de infantes connacionales al país, “pero –afirmó– son los menos” con respecto del número de centroamericanos. Abundó que este problema debe resolverse de manera regional, no con visión local.
Al concluir su participación en este acto, el ombudsman se trasladó al estado de Puebla para tratar de reconstruir los hechos del caso Chalchihuapan, relativos a la muerte de un niño derivada de un enfrentamiento entre policías y vecinos, por lo que dijo que hablaría con los habitantes. Reiteró que en septiembre podría estar listo el informe correspondiente.