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El senador José Narro Céspedes, líder de la Coordinadora Nacional Plan de Ayala (CNPA), acusó que 80 por ciento de los productores rurales del país se encuentran sumidos en el pobreza como consecuencia de una ley agraria que los mantiene excluidos de los programas gubernamentales de apoyo al campo.
Explicó que se trata de pequeños productores, en su mayoría comuneros, quienes requieren una nueva legislación que regule la vida interna de los núcleos y comunidades indígenas a fin fomentar su desarrollo económico.
En las instalaciones del Congreso de Puebla, Narro informó que impulsa en la Cámara Alta del Congreso de la Unión una reforma al marco normativo que comprende la expedición de una nueva Ley Agraria y de un nuevo código de procedimientos en la materia.
“El problema es que a los pequeños productores los dejaron sin créditos, sin apoyos, sin transferencia tecnológica, sin nada, por lo que estamos planeando con la nueva legislación que el ejido y la comunidad vuelvan a ser sujetos de desarrollo”, abundó.
La propuesta, enfatizó el senador en su ponencia, pretende colocar al ejido y a la comunidad en el centro de las políticas públicas, como se hizo en el gobierno de Lázaro Cárdenas pero ahora también como actores activos del desarrollo.
Narro confió que el presidente del país Andrés Manuel López Obrador apoyará el paquete de reformas, el cual contempla cancelar con carácter temporal la facultad de convertir las parcelas al régimen de la pequeña propiedad y considera sancionar con la cancelación de derechos agrarios individuales a quienes enajenen fracciones de parcelas.
Expuso que las medidas se sugieren para frenar la venta de la tierra, así como el desorden y la anarquía que actualmente impera en los ejidos, ante la falta de coordinación de sus integrantes.
Agregó que la situación actual de los ejidos es resultado de la Ley Agraria vigente desde el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, la cual llevó a los pequeños productores a la pobreza para obligarlos a malvender sus tierras, bajo la idea de que las pequeñas superficies son inviables y no competitivas.