Fortalecer el andamiaje del sistema de seguridad y combatir de manera efectiva la pobreza para reducir la inequidad social son los dos temas que el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas debe de atender en su último año de gobierno, consideró Emilio José Baños Ardavín, rector de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
En una reunión con los representantes de los medios de comunicación, señaló que en vías del que será el quinto informe de gobierno, en la agenda estatal deben de quedar claras cuáles serán las estrategias de seguridad, de combate a la pobreza y de desarrollo económico, además de que éstas deberán ser iniciativas de naturaleza interinstitucional e incluyente.
“Es una agenda que debe ser abordada por todos los flancos, porque Puebla no puede seguir con índices altos de pobreza. Se necesita una política más audaz para erradicarla, ya que si bien se ha avanzado en materias como salud y educación es necesario poner énfasis en la pobreza y la seguridad”.
Para el rector de la UPAEP incluso es necesario que “Puebla sea una fuerza en positivo de cómo se pueden hacer las cosas en seguridad”, por lo que es necesario que el gobierno del estado deje en claro cuál será la estrategia que dejará para la próxima administración. Agregó que ante la inseguridad “que manda mensajes de manera permanente porque son mafias que obedecen a otras lógicas”, debe proponerse una estrategia bien armada, misma que sólo puede venir desde el Estado.
En materia académica, el rector Emilio José Baños expuso que precisamente los retos sociales, económicos y culturales marcan el trabajo que la institución realizará este año, en la idea de ser incluyentes y priorizar el entorno social; sobre todo, agregó, tras el reconocimiento que recibió la UPAEP en agosto de 2015, por parte de la asociación internacional Ashoka como Changemarker Campus –campus transformador– por ser un centro de formación de agentes de cambio.
En ese sentido, dijo que el reconocimiento de esta organización no gubernamental conlleva dos aspectos en lo que se deberán trabajar: que la universidad se convierta en un referente de la innovación per se en sus áreas técnicas y científicas, y ser una institución pertinente en lo social para que su trabajo –de investigación y vinculación– sea en beneficio de la ciudadanía.
Como ejemplos mencionó el impulso que tendrán áreas académicas de ingenierías y salud, la primera con la apertura de la Ingeniería Aeroespacial y la otra con el impulso al Centro de investigación establecido en convenio con la asociación Nueva Esperanza que, en conjunto con las universidades de Notre Dame e lllinois, trabajan en el estudio y la atención del cáncer, particularmente con el pediátrico.
“Anualmente son un millón de horas hombre en servicio social, por lo que para otoño se aplicará un nuevo esquema para impulsar proyectos de incidencia social en las diferentes áreas”, concluyó el rector Emilio José Baños.