Martes, marzo 19, 2024

Premian a Salomón con la rectoría de la UTH por crear movimiento que llamó a no votar por el PRI

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Como una muestra clara y abierta del desprecio hacia la verdadera calidad educativa, el gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas nombró al ex diputado local édgar Salomón Escorza como nuevo rector de la Universidad Tecnológica de Huejotzingo (UTH). Dicha designación raya en el absurdo por tratarse de un personaje carente de trayectoria y prestigio académico, por ser un político rodeado de escándalos y porque ese puesto no se lo gana por algún mérito loable, sino por haber traicionado a su partido, al PRI, ya que en el proceso electoral que está por concluir armó un movimiento de priistas destinado a provocar la derrota de Angélica Salazar, quien fue la candidata del tricolor en el distrito de San Martín Texmelucan.


La victoria del panista Rubén Garrido en San Martín Texmelucan no se podría haber logrado sin toda la serie operaciones sucias que armó Salomón, las cuales fueron desde orquestar un movimiento que llamaba al voto de castigo contra el PRI y hasta impulsar a un militante del tricolor que cuestionó en los tribunales, en la prensa y en las organizaciones adheridas a dicho partido, la legitimidad de la candidatura de Angélica Salazar.

Ahora se le manda al puesto de la UTH para que el ex legislador siga teniendo presencia en la región de San Martín Texmelucan, cuente con fondos públicos y en el proceso electoral de 2016 repita el mismo comportamiento en contra del PRI.

Salomón Escorza no actuó en contra de su partido por convicción, sino obligado, luego de la ayuda que le brindaron desde el gobierno del estado para que a medidos de marzo de este año se mandara al archivo la demanda 1942/2014/

SNMAR–V, mediante la cual la joven de 26 años Adriana Flores Carmona lo acusó de haberla privado de su libertad y luego violarla en el domicilio familiar del ex diputado local del PRI.

Unos meses antes, entre miembros del grupo morenovallista se afirmaba que era imposible que Salomón no pisara la cárcel, al existir pruebas que eran contundentes de su presunta culpabilidad. Luego de eso vino el “perdón” desde las altas esferas del poder. En este espacio se escribió el pasado 12 de marzo que el “carpetazo” del archivo de la demanda por violación iba a obligar al ex legislador a actuar en contra del PRI en las campañas que estaban cerca de iniciar y así ocurrió.

 

Y el silencio

del PRI

 


El que Moreno Valle haya nombrado a édgar Salomón titular de la UTH es entendible, ya que encabeza un gobierno que no ha movido un ápice para mejorar la calidad de la educación pública en Publa y en los tres primeros años del sexenio, en la mayoría de las universidades dependientes de Poder Ejecutivo, se removió a los rectores –muchos de ellos con alta calidad académica– y fueron sustituidos por políticos vinculados al morenovallismo.

Lo que no es entendible es la actitud pasiva del PRI ante el comportamiento emblemático de dos destacados militantes priistas: el subsecretario de Gobierno Fernando Morales Martínez y édgar Salomón Escorza, quienes están bajo las órdenes del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas y en las recientes campañas electorales se dedicaron a buscar la derrota del tricolor en las urnas.

Tal situación plantea únicamente dos posibilidades:


  1. En la dirigencia estatal del PRI, encabezada por Ana Isabel Allende, hay tanto temor hacia el gobernador Rafael Moreno Valle que sus miembros prefieren fingir no percibir la deslealtad de algunos de sus ex legisladores, que iniciar procesos disciplinarios contra aquellos militantes del tricolor dedicados a hacer perder a este partido político.
  2. Existen acuerdos en lo oscurito entre la dirigencia del PRI y el gobierno de Moreno Valle que impiden a este partido asumir una verdadera posición opositora y echar a los militantes que actúan a favor del PAN y del grupo morenovallista.

En el caso de Salomón, junto con el activista Fermín Tostado, armó e San Martín Texmelucan un movimiento que realizó varias reuniones masivas en las cuales se llamaba a votar en contra del PRI, bajo el argumento de que era ilegitima la candidatura de Angélica Salazar. En el restaurante Grillos se llegó a escuchar a Salomón decirles a los asistentes: Voten por quien sea, pero no por el PRI.

Al mismo tiempo, de la mano de Salomón estuvo atrás del priista Alfonso Roldán, quien sin tener posibilidades de ganar la candidatura del PRI se inscribió de última hora en el proceso de selección del abanderado con el propósito de iniciar una serie de litigios contra Angélica Salazar para buscar que su postulación fuera desechada.

También se supo que todo este activismo sirvió para acercar al panista Rubén Garrido con núcleos de comerciantes, colonos y grupos de deportistas que estaban más identificados con el PRI y alejados del PAN.

Ahora, édgar Salomón llega a un cargo al que solamente se puede arribar por obra y gracia del gobernador del estado, pero de eso tampoco se quiere dar cuenta la dirigente priista Ana Isabel Allende.

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