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De las 32 entidades federativas del país, Puebla ocupó el tercer lugar en mayor número de denuncias tramitadas por la presunta comisión de delitos electorales, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
En el periodo de enero a julio de este año se abrieron 100 carpetas de investigación relacionadas con el desarrollo del proceso comicial, en el que se renovaron las presidencias municipales, diputaciones locales y federales, gubernatura, senadurías y presidencia del país.
Puebla solo se ubicó por debajo de Nuevo León y Oaxaca, ya que en el primer estado se alcanzó un reporte de 184 denuncias y en el segundo de 120; y superó a la Ciudad de México y Jalisco, donde se tienen 97 y 91 carpetas de investigación, respectivamente.
Se disparan denuncias tras los comicios del 1 de julio
A nivel estatal, la mayoría de las carpetas de investigación se abrieron tras la elección del 1 de julio, pues ese mes el SESNSP contabilizó 68, en junio se reportaron 26, en mayo cinco y en marzo una, mientras enero, febrero y abril concluyeron sin incidentes.
De acuerdo con un informe que elaboró el Consejo Local del Instituto Nacional Electoral (INE), en los comicios hubo balaceras, agresiones y robo de paquetes en 30 casillas instaladas en el estado que motivaron denuncias ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade).
Las irregularidades se concentraron en ocho municipios: Puebla, Mazapiltepec de Juárez, Tehuacán, Ahuazotepec, Quimixtlán, Cuyoaco, Izúcar de Matamoros y Acatlán, de los cuales en los tres primeros se informó la presencia de pistoleros.
El reporte del SESNSP también dio cuenta de 37 denuncias presentadas contra servidores públicos en los primeros siete meses del año, el doble de las presentas en el mismo periodo pero de 2017.
Interviene Fepade en centro de operación del PAN
Uno de los incidentes que ameritó la intervención de la Fepade fue la irrupción de líderes de Morena, el PT y el PES en el hotel MM de la ciudad de Puebla el 3 de julio pasado, donde el PAN tenía instalado un centro de operación que daba seguimiento a la jornada electoral, en el que estaban presentes magistrados, funcionarios del gobierno de Puebla y trabajadores del Instituto Electoral del Estado (IEE).
Tras el zafarrancho, elementos de la Fepade presentaron ante el Ministerio Público a 62 personas que trabajaban en el lugar, de las cuales cuatro quedaron en calidad de detenidos.
Morena acusó la operación de un laboratorio electoral en esas oficinas provisionales, el cual tenía como objetivo incrementar la votación de los candidatos de Acción Nacional, en especial de Martha Érika Alonso Hidalgo, hoy gobernadora electa.
A inicios de mes, el titular la Fepade, Héctor Díaz–Santana, declaró que no ha encontrado elementos para confirmar la acusación de Regeneración Nacional, por lo que la investigación se ha concentrado en la presencia de servidores públicos.
“De alguna manera es mucho más fácil de investigar porque tienen un horario laboral y de cierta manera no deberían estar fuera de su lugar de trabajo, es una investigación que sigue en marcha”, expuso el fiscal electoral.