La Auditoría Superior del Estado (ASE) de Puebla, que encabeza, David Villanueva Lomelí, está calificada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que carecen de autonomía para realizar sus funciones.
La ASE del Congreso de Puebla forma parte de las 24 instituciones especializadas en la fiscalización de recursos, que no aprobaron la evaluación del organismo multilateral.
Coahuila, Colima, Oaxaca, Querétaro, Quintana Roo, Tlaxcala, Yucatán y Zacatecas son las únicas entidades federativas en las que los órganos de fiscalización son independientes de sus legislaturas, lo cual equivale apenas al 25 por ciento del total de instituciones de auditoria oficial que existen en todo el país.
El estudio fue presentado en la capital del país el martes pasado, pero hasta ayer en el sitio de la OCDE ni en el de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) pudieron obtenerse los registros de cada entidad, pues sólo había boletines y discursios de sus respectivos titulares.
En su edición de ayer, La Jornada publicó que el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría, dio a conocer un estudio sobre la fiscalización en México, según el cual el 75 por ciento de los órganos locales están reprobados en su desempeño, lo cual representa un desafío institucional importante para alcanzar los objetivos.
En el marco de la presentación del estudio “Gobernanza pública del sistema nacional de fiscalización de México”, Gurría precisó que en muchos casos estas insuficiencias obedecen a falta de autonomía o carencia de recursos económicos o humanos.
Sin embargo, destacó la importancia de que México haya dado el paso para aprobar reformas para construir un sistema para combatir la corrupción y forzar una mayor rendición de cuentas.
El ex secretario de Hacienda alertó también sobre otros rezagos importantes, como el hecho de que de las catorce cuentas públicas que se le han remitido a la Cámara de Diputados, solamente hay seis aprobadas en su totalidad.
Por su parte, el auditor superior de la Federación, Juan Manuel Portal, señaló que uno de los principales desafíos al combate a la corrupción es que es un fenómeno que se afiance y reproduce por redes que deben desactivar para realmente hacer un combate sistémico de la corrupción.
Destacó que las reformas aprobadas potencializan las facultades de cada una de las instancias involucradas y alertó sobre la necesidad de fortalecer los órganos fiscalizadores subnacionales, para que realmente opere el sistema nacional anticorrupción.