Dos de los científicos que el martes fueron reconocidos con el Premio Nobel de Física, por abrir una nueva era en la astronomía al detectar las ondas gravitacionales, dijeron que esperan llamar la atención de estadounidenses que se inclinan por desechar los consensos científicos por razones políticas.
El trío de científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y del Instituto Tecnológico de California (Caltech) ganó el Premio Nobel de Física por medio siglo de trabajo para confirmar la presencia de las ondulaciones en el espacio y tiempo previstas por Albert Einstein hace un siglo.
La victoria, la segunda de la semana de científicos estadunidenses, ocurre cuando el gobierno del presidente Donald Trump ha propuesto recortar fondos para la investigación científica y ha expresado su escepticismo sobre el cambio climático.
La posición de Trump refleja una desconfianza mayor entre los estadounidenses, un número creciente de los cuales rechaza los hallazgos científicos sobre asuntos como la seguridad de las vacunas o si el hombre provoca el cambio climático.
“Vivimos en una época en la que la reflexión racional sobre la evidencia no es universalmente aceptada y de hecho está en peligro. Eso me preocupa mucho”, dijo Rainer Weiss, profesor emérito de física del MIT y parte del equipo homenajeado el martes.
Barry Barish de Caltech, también profesor emérito de física, tiene preocupaciones similares.
“Cualquier cosa que nos haga tomar más en serio a científicos, economistas, químicos, físicos o biólogos creo que es útil en momentos en que las cosas se distorsionan debido a que la gente no presta atención a todos los hechos”, dijo Barish por teléfono.
“Es una locura que tengamos un país donde que se crea o no en el cambio climático dependa de en qué partido político se encuentra uno”, dijo Barish. “Tenemos en este momento un gobierno que hasta ahora parece ser muy anticiencia”.
Los esfuerzos para hablar con Kip Thorne, el tercero del equipo y también de Caltech, no tuvieron éxito.
Información de La Jornada