Las campanas, los rezos y los cantos como elementos de una codificación sonora que daba sentido y estructura no solo a los templos, conventos y órdenes sino a los habitantes de una ciudad novohispana como Puebla. En ello, repara la exposición Sonoridades conventuales. Campanas, alabanzas y rezos que el próximo sábado 19 de mayo a las 12 horas abrirá en el Museo de arte religioso ex convento de Santa Mónica –18 Poniente 103, Centro– con una charla de la curadora Rosalva Loreto López.
Durante una conferencia de medios, Laura Guzmán Vázquez, directora del museo adscrito al Instituto Nacional de Antropología e Historia, dijo que la muestra forma parte del Programa de Investigación Especializada de la Colección del Museo de Santa Mónica (Piecomus). Expuso que en ella se integran 30 piezas del acervo del recinto como pinturas y libros además de que se incluyen, por primera vez en un programa expositivo, un piano y un armonio que también forman parte de la colección.
Sacarlas del acervo, expuso la etnóloga de formación, tiene que ver con la idea de difundir el patrimonio material ya que “es al público donde deben llegar estos objetos, pues son propiedad de todos”. La funcionaria agregó que a través del Piecomus se permite ofrecer una mirada que ve de otra forma la colección, a la par de que la pone en valor, la conserva y la respeta.
Por su parte, la curadora de Sonoridades conventuales Rosalva Loreto señaló que la muestra refiere a una de las características más importantes de los templos católicos novohispanos: el uso de campanas localizadas en sus torres y espadañas.
Dichos elementos, expuso la historiadora por el Colegio de México, recordaban a los habitantes sus obligaciones piadosas y comunicaban cualquier acto extraordinario: lo mismo un fallecimiento o la visita de un clérigo importante.
“La función del sonido no solo fue llamar a las monjas al coro cada tres horas sino para que acudieran a sus procesiones internas como ocurrió en el convento de La Purísima Concepción con sus 14 patios interiores. También fue una forma de que el convento expresó su calendario patronal; un ejemplo fue que el templo de Santa Mónica tañía sus campanas y los templos jesuitas y la Catedral replicaban”, refirió.
La directora de Patrimonio histórico universitario de la Vicerrectoría de Extensión y Difusión de la Cultura de la UAP explicó que la exposición tiene tres núcleos. El primero concerniente al papel de los conventos y los templos respecto a la jerarquización de esos sonidos. El segundo, en cambio, relativo a las sonoridades que transitaban adentro de los espacios conventuales a partir de los coros, “el corazón de los coros altos”, con rituales y el traspaso de la oralidad. El tercero para abordar qué otro tipo de musicalidad estaba presente en los conventos que hicieron una “apropiación territorial barroca”.
Rosalva Loreto destacó la incorporación de una sala multimedia con la que se da paso a otra investigación sobre la zoología y la botánica existente en el propio ex convento de Santa Mónica, en donde se contabilizaron 18 especies de aves y 20 de flores en los jardines interiores. Sobre ellas, el compositor y académico Daniel Jiménez hizo un tema que es “una mezcla de historia, sonoridades y pasaje sonoro”, como expuso el propio artista. Agregó que se trata de una pieza para violín “con una estética barroca renacentista que se conjuga con la tecnología y la investigación”.
Destaca que además de la participación del músico Daniel Jiménez, se sumó un grupo de jóvenes universitarios de la Universidad del Valle de México campus Puebla, para la realización del video que se ubica en dicha sala.
“Es difícil plantear cosas nuevas en un plano con avances y con generaciones que tienen nuevas perspectivas y formación. Los investigadores ‘viejos’ vivimos una transición, que es colaborar, basarnos en lo que hacen y enriquecer las perspectivas. Por tanto, este es un trabajo más que interdisciplinario, pues es colegiado”, concluyó la curadora Rosalva Loreto.
Tras su apertura, la exposición Sonoridades conventuales permanecerá hasta el 2 de septiembre acompañada de un programa académico que inicia el próximo jueves 24 de mayo a las 16 horas con la conferencia Música de tecla para instituciones femeninas novohispanas a cargo del reconocido investigador Edward Pepe.
Luego, el 15 de junio a las 16 horas continuará la conferencia Los secretos descubiertos durante la restauración del armonio Alexandre Pére & Fils a cargo de Olivia Ibarra, acompañada del propio Daniel Jiménez en el armonio y la soprano Adriana Alonso. Seguirán las conferencias Prácticas litúrgicas musicales en el convento agustino de Santa Mónica –6 de julio, 16 horas–, El convento de agustinas recoletas de Santa Mónica: un proyecto secular ante la consolidación de una identidad de carácter regular –10 de agosto, 16 horas–, y Paisaje sonoro en la pintura Cantar de los cantares –31 de agosto, 16 horas–, impartidas por Gustavo Mauleón, Adriana Alonsó y Daniel Jiménez, respectivamente.