Altepexi. El accidente aéreo donde perdieron la vida la gobernadora de Puebla, Martha érika Alonso Hidalgo y su esposo, el senador Rafael Moreno Valle, también enluta a este municipio, ya que el asistente particular del legislador, Héctor Baltazar Mendoza, originario de esta comunidad también falleció en el percance.
Héctor contaba con 33 años de edad, llevaba más de 10 trabajando al lado de Rafael Moreno Valle Rosas, estaba dedicado en cuerpo y alma a su labor que desempeñaba con absoluta lealtad, de tal modo que fue el único de sus colaboradores que acompañaba a la pareja en el vuelo el pasado lunes.
Se sabe que el joven era ahijado del senador, de quien consiguió ganarse su confianza de modo que desde que Moreno Valle fue gobernador del estado lo llevó consigo dentro del grupo de sus más cercanos colaboradores y con el paso de los año terminó por convertirse en su mano derecha.
En sus publicaciones en redes sociales se encuentran una gran cantidad de imágenes donde demostraba su absoluto apoyo a Moreno Valle, tanto en sus aspiraciones por la presidencia de la república como finalmente por la senaduría.
Su familia se sentía orgullosa del trabajo que realizaba, para él era de gran importancia mantenerse cerca de Moreno Valle y desarrollar las responsabilidades que se le encomendaban de tal manera que incluso los familiares de Rafael Moreno Valle se dirigían a él para tener conocimiento de la agenda del día.
La gobernadora, Martha érika Alonso Hidalgo también tenía una gran cercanía con Baltazar Mendoza, algo que no era secreto para los habitantes de Altepexi, por lo que su muerte resultó de gran impacto para la comunidad que acudió a dar el pésame a sus familiares apenas se enteraron de la tragedia.
Sus amigos lo recuerdan como un hombre alegre, responsable, cuidadoso de sus deberes y dado a convivir en cada ocasión que podía con sus seres queridos, horas antes del fatal accidente se reunió con algunos de ellos y entonó como un presagió la canción “un puño de tierra”, según recuerdan en sus publicaciones de redes sociales algunos de quienes le acompañaron en ese encuentro.
Héctor, debido a su trabajo, no radicaba ya en Altepexi, pero su familia más cercana sí se encuentra en esta población, por lo que al cierre de esta edición, aún estaban en espera de recibir sus cenizas para efectuar los actos fúnebres en su honor.