Francisco Fraile García (FFG) considera sumamente dificil que su partido, Acción Nacional (PAN), pueda o quiera renunciar a la actitud sumisa que ha tenido frente al gobernador Rafael Moreno Valle Rosas, pues sus liderazgos están cómodos con esa relación que les produce dividendos.
En la segunda parte de la entrevista con La Jornada de Oriente (JO), señaló que muchos de los panistas que ahora son leales al titular del Poder Ejecutivo lo son por conveniencia.
Sin embargo, el llamado “pastor” advierte que esa condición de sometimiento voluntario no es privativa del blanquiazul, sino que está contagiada en prácticamente todos los sectores sociales, pues los periodistas y políticos, por ejemplo, han renunciado a la crítica.
En ese escenario deplorable, Fraile García distingue a las universidades –en concreto a la UAP, la Ibero, UDLAP y Upaep– como las generadoras de ese equilibrio crítico que se necesita para corregir el talante aujtoritario de Moreno Valle Rosas.
“La sociedad está tratando de resolver sus problemas por sí misma; no voltea la cara, sino que intenta con sus propios recursos resolver sus problemas y ahí la lleva. Porque la sociedad algunos suman voluntades para hacer negocios, algunos otros para ayudar a otros más necesitados –para los viejos, los enfermos– esto va configurando una sociedad muy fuerte. Puebla tiene una sociedad muy fuerte, pero la tiene desarticulada, desmembrada, y esta acción de desmembramiento implica que cuando tú vas a la búsqueda de alguna posibilidad gubernamental que te pueda ayudar generando recursos o espacios tienes que hacer la genuflexión y decir “sí señor”, pero aparte votar en una dirección determinada, esto es lo que ha dañado definitivamente las instituciones. Yo creo que ha llegado el momento en Puebla de pensar muy en serio en la sociedad; el movimiento social debe ser diferente”, indica.
Y añade: “Déjame tocar un tema muy concreto, de ustedes los medios: los periódicos, algunos, se volvieron simplemente expresión de la voz de un gobernante, no sale la nota que no quiere que salga. Esto es terrible; cuando la sociedad deja de estar informada plenamente esto provoca dolor, dolor porque todo mundo dice: ‘pero si yo oí a fulano, a perengano y a zutano de que esto está sucediendo, ¿por qué los periódicos están callados?’, porque simplemente las plumas de los que son críticos ahora ya no son críticos; claudicó la crítica”.
Agrega: “Yo quiero a Puebla, y creo que el poder se da para servir, no para que le sirvan a uno, es por lo que opino y digo que la suma de voluntades en cada una de las áreas puede modificar la actitud del gobernante por buen camino; podemos hacerlo”.
JO –¿La forma de gobernar de Moreno Valle es peor que la de gobernadores priistas recientes como Mariano Piña Olaya, Manuel Bartlett, Melquiades Morales o Mario Marín?
FFG –Lo que sucede es que ahora estamos enfrentando a un gobernador estructurado, estudiado, cuidadoso, no sólo de la forma, sino también del fondo; estudioso de quién se mueve así, quién se mueve así, cómo lo controlo, cómo lo muevo, que esto, que el otro, y esto es una realidad, esto es lo que estamos viviendo en Puebla.
“Yo no sé, quiza mis expresiones paraecieran duras, pero yo creo que es el tiempo de una reflexión profunda. La Universidad Autónoma de Puebla, mi alma máter, debe volver a ser critica, no desordenada, crítica, con posición firme, de análisis profundo, a la crítica de fondo para opinar qué es mejor para Puebla, todo, insisto es ese simplón ‘sí señor’. La Ibero, la UDLAP, la Upaep, todas las universidades deben entrar en un proceso de sacudimiento frente al Poder Ejecutivo, y no para confrontar, sino para corregir y ayudar a que tengamos una sociedad mejor, no un gobernante mejor, una sociedad mejor, y mientras haya pobres no hay gobierno bueno. Mientras no todos tengan la misma oportunidad, no hay gobierno bueno. Los gobiernos se hicieron para que todos fuéramos felices y si alguien no come hoy no es feliz”, abunda.
JO –Usted que es una pieza fundamental del PAN, ¿cree que habrá una reacción de ese partido?
FFG –La veo muy difícil porque los que disfrutan las mieles del poder están acomodados, ya no se atreven a la crítica. Tu te atreves a la crítica cuando corres los riesgos de asumir lo que estás diciendo; por supuesto que estas expresiones mías creo que tendrán alguna consecuencia, y te acomodas y entonces en esa comodidad del “sí señor”, es padrísimo. Si La Jornada de Oriente decidiera decir “sí señor”, pues la pasaría bien, seguramente tendrían ingresos mucho mejores, pero si se llega a eso tu pluma cada vez que vas a escribir tienes que preguntar si hay tinta o no hay tinta de arriba; esta es la verdad de las cosas que están sobre la mesa.
Completa: “Tengo amigos que eran muy críticos, se volvieron cómodos. Tengo amigos que son políticos y me parece que tienen un exquisito sentido de lo político que decidieron mejor decir ‘sí señor’. Entonces este es el reto del Partido Acción Nacional, pero no sólo del PAN, sino de todos los partidos; este es el problema más serio en Puebla.
JO –¿Y esta relación del PAN con el gobernador se replica en los demás estados donde su partido gobierna o es exclusiva de Puebla?
FFG –Es una situación particular de Puebla.
JO –¿En otros estados el PAN ha conservado su veta crítica?
FFG –Tan es así que hemos perdido elecciones. En algunos casos hemos sido críticos; en otros hemos caminado con el gobernador, pero haciéndole las observaciones. Por ejemplo en Guanajuato a (Juan Manuel) Oliva se le hicieron observaciones muy importantes por parte de su propio gabinete; hubo panistas que le hicieron críticas al gobernador y se logró un buen gobierno.
“No hay que tener miedo a la crítica, a la disposición de la discusión, de entrar el diálogo para encontrar soluciones mejores para la sociedad, eso es lo que falta en Puebla, no hay diálogo, hay acciones de gobierno”, remata.
JO –¿Y desde el CEN del PAN, cómo se ve a Moreno Valle?
FFG –Están acomodados porque el pensamiento es el siguiente: “Pues si este puede controlar elecciones, este tiene dinero, este es el que conviene”, es decir, mi partido también tiene el pecado de la conveniencia, de lo que es más suave y fácil de hacer, no del concepto de convencer. Para sacar 650 mil votos derechos en una elección se necesitó caminar muchos meses y muchos años pueblo por pueblo.
JO –¿Se refiere a los votos que el PAN obtuvo cuando usted fue candidato a la gubernatura?
FFG –Exactamente; no era asunto de dinero; era asunto de trabajo político. Si tú recuerdas yo dije que la puerta estaba abierta para que entrara alguien diferente y así sucedió. Porque además a Mario (Marín Torres, el ex gobernador de Puebla) yo lo respeto, pero me parece que perdieron el sentido de lo que era gobernar; bueno, no supieron nunca cómo se tenía que gobernar. Entonces yo no quiero que se regrese a ese tipo de acciones ni nada, porque la modernidad ya está en Puebla, pero ese contacto personal con la gente todavía vale hoy y todavía hay la fortuna que hay más de uno que me pregunta: “¿Cuándo regresas?”.
JO –¿Y sí va a regresar?
FFG –Sí, definitivamente sí, no sé si con el Partido Acción Nacional, no sé si con otro partido político. No sé si tome nuevamente a Rocinante y caminemos otra aventura, pero de que voy a caminar, voy a caminar. Yo soy un político de vocación, no soy un político para que me aplaudan, soy un político comprometido con la sociedad. Yo no traigo profeta en ancas, no sé cuál camino que caminaré, pero seguro que no será por la vereda del “sí señor”.
JO –Hay quienes pronostican que Moreno Valle logrará lo que otros gobernadores, incluido Marín, buscaron pero no pudieron: la conformación de un maximato, lograr que su poder trascienda el sexenio, ¿es eso posible?
FFG –Si los partidos políticos y a los que le interesa el poder siguen por la política del “sí señor”, sí se configurará. Él de hecho lo tiene pensado, meditado y decidido. Si me apremias creo que tiene a los bateadores designados. La idea profunda de abrirle en el PAN a Rafael Moreno Valle fue que tuviéramos gobernantes que amaran fundamentalmente a los que menos tienen. Eso es un concepto profundo de la política: la política se hizo para ayudar al último de la cuerda, pare evitarnos una guerra, si la pobreza sigue aumentando no nos extrañe que crezcan las bandas para cambiar las cosas.