Trabajadores inconformes del ISSSTE en Puebla denunciaron de nepotismo al delegado Álvaro Parra Salazar, a quien además acusaron de contratar a familiares en la dependencia.
Por tal razón, demandaron al director general, Sebastián Lerdo de Tejada, la destitución de Parra Salazar de la delegación federal.
Los familiares contratados por Parra Salazar son esposas de dos de sus hermanos; se trata de María Guadalupe Baleón Flores, jefa de Acción Social, Cultural y Deportiva, y Silvia Arias Papaqui, jefa de la oficina de Licencias Médicas, Referencia y Contra referencia y médico de Enlace de la CMF de Puebla. Los declarantes pidieron el anonimato ante las represalias posibles.
Asimismo, acusaron al funcionario federal de despedir injustificadamente a una veintena de trabajadores, y en su lugar fueron reubicados “personajes” afines al diputado Javier López Zavala.
Por su parte, la delegación del ISSSTE fijó una postura al respecto, al asegurar que se trata de un grupo de empleados resentidos por su salida, pero sobre todo porque fueron dados de baja por su mal desempeño laboral.
Los denunciantes, quienes presentaron a este medio de comunicación una copia del recibo de nómina de Guadalupe Baleón, aseguraron que tras el arribo del funcionario federal fueron despedidos los jefes de Nómina, Adquisiciones y Departamento de Sistemas; además, hicieron público que se nombró a Gustavo Ernesto Vargas Barbosa como jefe de Recursos Humanos de la Delegación, cuando el trabajador fue inhabilitado del 29 de octubre de 2010 al 28 de octubre de 2011 por la supuesta venta de plazas.
Los inconformes aseguraron que desde la creación de la delegación del ISSSTE en Puebla no hubo antecedentes de intimidación al personal en esta dependencia, por lo que solicitaron al director del instituto que intervenga en esta situación para evitar un conflicto mayor.
“Estas situaciones tienen a la delegación hundida en un descontrol total, pues la gente de Javier López Zavala sigue haciendo de las suyas con la llegada del doctor álvaro Parra al ISSSTE”, reza uno de los párrafos de la carta que circularon los trabajadores inconformes del nosocomio, firmada supuestamente por Verónica Arroyo.
Por lo anterior, demandaron que se sancione al delegado por este abuso de autoridad y por hacer de la delegación “un negocio para su familia y amigos”.