Tras ser reprobados en su desempeño por el Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), los diputados del Congreso de Puebla minimizaron los resultados del análisis señalando que no conocen a esa institución que lleva tres años evaluando al Poder Legislativo local.
El posicionamiento lo fijó el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, el perredista Carlos Martínez Amador, quien anunció que los representantes populares buscarán un organismo nacional para que mida sus resultados y se ajusten a sus conclusiones.
La justificación que dio Martínez para no atender el estudio del CEEY, donde se señalan visos de inconstitucionalidad en la regulación de los proyectos para la prestación de servicio que ideó el gobierno estatal y aprobó el Congreso, es que “hay una infinidad de instituciones que quieren emitir opiniones”.