Atlixco. Como una arbitrariedad y una violación a las garantías individuales de Claudia García Martínez calificaron comerciantes y familiares de esta mujer su detención en un operativo policiaco realizado recientemente en farmacias de la ciudad, la cual incluyó también el encarcelamiento de un par de personas más y la clausura de igual número de negocios expendedores de medicina.
Rodolfo García, hermano de la afectada, indicó en entrevista que desde el jueves pasado que se la llevaron no habían podido localizarla y fue hasta el día domingo cuando la detectaron en el penal federal de Nayarit.
Las acusaciones para mantenerla retenida no están del todo claras, indicó Rodolfo García: “Debido a que según relatos de testigos, los agentes federales se presentaron en la farmacia Corazón de Jesús el jueves 5 de diciembre a las 13 horas solicitando un producto en específico: el similar de la píldora del día después, y en ese momento se le informó que estaba detenida”.
Indicó que pasaron 20 horas para que los agentes federales presentaran una orden de aprensión para llevarla, esposada, primero al Distrito Federal y, posteriormente, ser enviada a Nayarit a un penal para criminales peligrosos.
En una primera instancia, acusó, la acusación giró entorno a la venta de medicamentos clonados, después por una presunta demanda del laboratorio que cuenta con la patente y, finalmente, por una denuncia de salubridad.
Pero este miércoles al mediodía, tanto familiares como compañeros comerciantes esperaron varias horas la llegada de la Policía Federal y de las autoridades correspondientes quienes abrirían el local, previamente sellado, para revisar una vez más la procedencia de los productos que expende.
Casi cuatro horas después los uniformados volvieron a uno de los locales revisados, que se ubica en la calle 3 Sur, en pleno Centro Histórico, a llevar a cabo un nuevo cateo. Los familiares de la afectada denunciaron que al hacerlo están violando el artículo 16 Constitucional en su párrafo 12.
Los testigos afirman que tras romper los sellos, ocho agentes sólo tomaron fotos del interior de la farmacia. De esa actividad, indicaron, dio fe la Notaria Pública Amparo Montero Serrano.