El tambaleante barco
No habrá cambios en el equipo de Enrique Peña Nieto, anotó informado columnista hace varios días. Ahora se anuncia, para el jueves 27, modificaciones en leyes y seguramente en colaboradores. Ya empezó a ocurrir esto último aunque fue poco destacado en los medios. Despidieron a los subsecretarios de la SEP, Enrique del Val Blanco y Alba Martínez Olivé, ambos fueron militantes comunistas; ¿ocurrirá lo mismo con el vocero de Educación, Jorge Medina Viedas, ex del PCM? Al par citado en un trascendido, se dijo, se les perdió la confianza. Entraron en lugar de Enrique y Alba diputados, uno, obvio, del estado de México. Lo que muestra que lejos de airear el ambiente el círculo íntimo parece cada vez más asfixiante. Grave, ya que lo indispensable es ampliar las voces, algunas discrepantes, y, sobre todo, planear nuevos enfoques, estilos, formas de conducción, lejos del enojo, la actitud perdonavidas y la idea que los críticos son molestos e incómodos. Que hay una exigencia, válida, porque se expliquen muchas cuestiones, lo demuestra que hasta en el programa de El Gordo y La Flaca, luego de que el primero correteó a Sofía Castro para que dijera porque iba a los Grammy y la situación de los 43, la hija de “La Gaviota” se negó a contestar; luego vinieron las bromas y hasta Televisa salió raspada, ya que nadie cree que Angélica tuviera unos sueldos que ni en Hollywood. En el medio artístico: Rubén Blades, Calle 13, Miguel Bosé, Juan Manuel Serrat y Atom Egoyan, entre muchos otros, se han solidarizado con los padres de los normalistas guerrerenses. No se diga en los informativos del exterior. Recientemente Le Monde fue crítico en serio, y hasta El País, donde amigos de Enrique tienen acciones, han sido medianamente cuestionador del actual ejecutivo. El honesto José Mujica (galardonado por Peña con el Águila Azteca), presidente uruguayo, dijo lo que todos sabemos acerca de la corrupción, la ineptitud gubernamental y la impunidad; luego rectificó, pero el golpe estaba dado; y en Chile se tiene preocupación por Lawrence Maxwell, detenido ilegalmente el 20 de noviembre, igual que Atzin Andrade de Artes Plásticas y nueve más, entre ellos alumnos de la FCPS de la UNAM: Tania Damián, Hugo Bautista e Hillary González, que están ¡válgame Cristo! en penales de Alta Seguridad por supuestos ataques a la nación, reinventando el artículo 145 de disolución social (sonríen Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría). Menudo trabajo para el encargado de la CNDH, Luis Raúl González Pérez, y Perla Gómez, de los derechos humanos en el DF; aunque también para los centros de estudio de los alumnos, quienes no se han pronunciado categóricamente en defensa de sus muchachos inocentes, hasta que se demuestre lo contrario; excepción del director de la FCPS, Fernando Castañeda. Que en Rusia y Cuba hayan apoyado a los 43, es algo nunca visto, sobre todo en la Isla de Fidel. Que los empresarios estén cada vez más enojados por la inseguridad, la falta de crecimiento y los altos impuestos, no tiene precedente. Que los partidos políticos, todos, se hundan en el desprestigió (ahora el Panal, de Luis Castro, traidor a Elba Esther, plantea una ley contra los encapuchados, en lugar de proponer que se acabe el latrocinio en el SNTE, de su compadre Juan Díaz) es un reflejo de la falta de vías para transitar. Que cada vez más fotorreporteros se quejen de palizas de los azules y robo de equipo, como Eduardo Verdugo de AP, o lo que vivió de otra manera, María Idalia García, del portal Eje Central, es algo digno de África. En fin, que si no hay resultados y continúa la escenografía peñista, la nación se encamina a un rumbo donde el navío puede encallar.
Centenario
Bien que se festeje los cien años del nacimiento del gran José Revueltas. Pero éste y el inmenso Efraín Huerta (Gran Cocodrilo y azulgrana sin par) lo celebrarían más si en realidad en lugar de sólo hablar de sus obras importantes, sus aportes a la literatura universal, su trabajo incansable en muchos terrenos, incluyendo el periodismo y el cine, se les honrara siguiendo su ejemplo de luchadores contra la injusticia y a favor de los más desvalidos. Las obras de ambos, no pueden ser citadas y recitadas en el vacío, sin que tengan amplias repercusiones que ahora deben ser tomadas en cuenta ante la emergencia nacional actual. Tan dados a hacer estatuas, otorgar premios en nombre de famosos, realizar tirajes de libros que muchas veces se embodegan y hasta mesas redondas en donde se habla de lo anecdótico y no del compromiso, es más bien hora de entender lo que se escribe en toda su complejidad, hondura, vuelo. Sus lectores tenemos una deuda con estos señores no únicamente en la reflexión pasiva y el cálculo de sus pasos, sino tratar de cabalgar con ellos, en estos momentos que sus letras están más vivas que antaño. Claro, esto no lo dirán las autoridades que reciben un presupuesto para dilapidar sin que exista mayor repercusión en lo que se hace. Y qué decir de los empleados de la SRE, tan dados a recitar poemas de Octavio Paz y no a seguir su ejemplo de renunciar ante las injusticias. Meade vuela mejor a Chile.
Y ahora, la censura
Ya van, cuando menos, dos ataques cibernéticos, al portal SinEmbargo, en tanto los “investigadores” de la policía especializada en estos menesteres, de la PGR, no encuentren la menor señal para detener a los culpables. Las informaciones, los reportajes diarios y las columnas trascendentes que leemos diariamente en este medio no las encontramos en otros lugares. Mientras a su director, Jorge Zepeda Patterson, se le premia en España por su más reciente novela: Milena o el fémur más bello del mundo, aquí se le trata de meter el pie y a los lectores se nos dejan desinformados por horas. Por más protestas, la autoridad, como es frecuente, se hace la desentendida. Agresión a los hacedores, a los lectores y a los que dialogan cotidianamente con los autores. En Puebla, también se dejó en tinieblas otro medio electrónico e- consulta de Rodolfo Ruiz, el cual ha sido un crítico permanente de ese señor que está llevando a la ruina por años a dicha entidad: Rafael Moreno Valle. Y es que la represión y el rezago social van en aumento y es cada día más notorio, pero serán mayores las dificultades en los siguientes años.
Tres
El viernes 21 hubo una ceremonia de reconocimientos a los trabajadores de Radio Educación que cumplieron de 15 a 35 años de antigüedad. Hablaron el director de la emisora, Antonio Tenorio Muñoz Cota, y los compañeros Antonio Guadarrama y Sonia Riquer. Se coincidió en la pluralidad de ideas, se recordaron a directivos como Granados Chapa, se dijo que hubo otras autoridades no receptivas a las demandas sociales (Sonia), se extrañó a Emilio Ebergenyi y Marcial Alejandro, se reivindicó el derecho a la disidencia y se apoyo a los padres de Ayotzinapa con la demanda: “Vivos se los llevaron; vivos los queremos”; lástima que ahora sabemos por Gabriel Sosa Plata: el presupuesto de la estación, indispensable más en tiempos difíciles, sufrió un recorte de 7 millones de pesos (El Universal, 24 de noviembre), ¿por qué Conaculta y SEP? Un memorioso amigo me recuerda que antes de la llegada de Ángel Aguirre a la gubernatura de Guerrero, Claudia Corichi García, hija de Amalia, la vocera del PRD, le prometió al defenestrado todo el apoyo económico y de dinero; la conversación grabada mostraba una voz bastante trémula, pastosa de la ex senadora. ¿Qué dirá ahora la señora encargada de dar la cara ante la prensa a nombre de Carlos Navarrete? El programa: Sacro o profano del maestro Bernardo Barranco (canal 11), en el que se trató el asunto de La Santa Muerte, fue otro cañonazo más; en esta ocasión estuvieron José Gil Olmos y el profesor Elio Masferrer; de los mejor en la tele.
@jamelendez44