En el mismo lugar donde inició su campaña hace 60 días, Claudia Rivera Vivanco, candidata de Morena a la alcaldía de Puebla, cerró sus actividades con un discurso en contra de la inseguridad, marginación y pobreza que predomina en la cuarta ciudad más importante del país.
En el último día de promoción al voto, la abandera de izquierda sostuvo una reunión con maestros de diferentes sindicatos. También realizó un recorrido por la rotonda de la “China Poblana”, con su compañero el candidato de Morena a la diputación federal por el Distrito 9 y ex líder sindical del magisterio poblano Guillermo Aréchiga.
Por la tarde, presentó la plataforma de “Ciudad Incluyente” en el tema del derecho a la cultura, y minutos antes de la medianoche dará su último mensaje en la Unidad Habitacional de San Miguel.
Después de una pugna dentro del Morena, Claudia Rivera logró la candidatura a la presidencia municipal de Puebla, con el respaldo de la base de militantes, a diferencia de otros partidos.
En ese sentido, la militancia de Morena ve en Claudia el reconocimiento a los fundadores del partido que inició como una red ciudadano, en apoyo a las aspiraciones presidenciales de Andrés Manuel López Obrador.
Lo anterior debido a que algunos morenistas de cepa fueron relegados de las candidaturas en este proceso electoral para dar cabida a personajes que renunciaron a otros partidos políticos, entre ellos el PRI. Por esta razón, Claudia pregonó durante su campaña que no hace falta tener “padrinos políticos” para llegar al poder y servirle a la gente.
Con un empate “técnico” en la intención del voto, contra su rival, el panista Eduardo Rivera Pérez, la lopezobradorista podría “hacer historia” –como dice el nombre de la coalición de los partidos que la postulan– y convertirse en la primera mujer de izquierda en gobernar Puebla.
A manera de balance, en el inicio de su campaña, la empresa demoscópica Más Data dijo que Claudia Rivera inició con una ventaja de 5 puntos porcentuales en las preferencias electorales sobre Eduardo Rivera, quien busca por segunda ocasión ser presidente municipal de la capital poblana; sin embargo, la buena aceptación de Claudia entre la ciudadanía poblana ha generado una inercia en el repunte de su simpatía en la intención del voto, sumado a la ola lopezobradorista en todo el país.
Aunque en un inicio era una desconocida como política, la economista por la UAP y maestra en Desarrollo Regional Sustentable por el Colegio de Puebla logró posicionarse como una de las “favoritas” al gobierno de la ciudad, incluso entre sectores poco amigables con la izquierda, como el empresarial.
Este respaldo lo obtuvo gracias a sus continuos encuentros con diferentes gremios de la Iniciativa Privada, como los constructores, restauranteros, así como de la industria y el comercio; además, logró amalgamar el respaldo al comercio formal, así como a los tianguistas y al comercio popular, al que propuso crear un corredor para mejorar sus ventas.
Pero tal vez donde ha recibido el mayor respaldo es entre los jóvenes, mujeres, integrantes de la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual y Transgénero, así como con los deportistas, ya que Claudia es futbolista y practicante de las artes marciales.
Su respaldo a las minorías, le ha costado enfrentar una serie de “campañas negras” en su contra, incluso por católicos que la ven como una amenaza tras asegurar que de llegar a la alcaldía legalizará las bodas entre personas del mismo sexo.
A pesar de ello, Claudia Rivera se mantiene de pie y dispuesta a defender el voto este domingo primero de julio, luego de informar que Morena tiene cubierta la vigilancia en el 100 por ciento de las casillas.
Su plataforma “Ciudad incluyente” para el gobierno de la capital se basa en cuatro ejes de trabajo: Derechos a la ciudad; Seguridad Ciudadana; Servicios públicos y educación; y Ciencia, Cultura y Deporte.
Para crear este plan se efectuaron tres foros ciudadanos de donde se recogieron las propuestas, que contaron con el aval de un Consejo Consultivo conformado por 30 diferentes especialistas, siendo el tema de Seguridad Pública, el prioritario.
Al final, Claudia Rivera aseguró que su gobierno será incluye y transparente. Se gobernará para todos y habrá inclusión para todos los sectores de la sociedad.