Un par de agentes de la Policía Municipal de Puebla fueron detenidos la madrugada del pasado sábado, fuera de su jurisdicción, en Chachapa, junta auxiliar de Amozoc, donde se les sorprendió escoltando un convoy de cinco camionetas que escoltaban 15 mil litros de combustible robado en ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
A los elementos municipales de Puebla se les aprehendió tras un enfrentamiento con agentes de la Policía Estatal, del que no resultaron heridos, pero los ladrones que conducían los automotores lograron escapar, según la versión oficial que se difundió a los medios de comunicación.
El Presidente Municipal Luis Banck Serrato instruyó a la Contraloría y a la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (SSPYTM), que realicen “una investigación exhaustiva y hasta las últimas consecuencias, sobre los hechos que presuntamente involucran a dos elementos de la policía municipal en el robo de combustible”, se informó en un comunicado.
Asimismo, el alcalde señaló que “continuarán y se reforzarán las pruebas de control de confianza a los efectivos de la policía municipal y además, se reforzará la supervisión y el monitoreo permanente de sus actuaciones”.
De inmediato, la Unidad de Asuntos Internos de la SSPTM, abrió el expediente número UAI/DRS-028-S1/JA/SP/2017, a fin de dar cauce legal a las indagatorias respectivas.
Por su parte, la Contraloría Municipal inició el procedimiento administrativo y de determinación de responsabilidades, en contra de los servidores públicos a que haya lugar, por los hechos registrados “la noche de este viernes” (sic).
Igualmente, el Presidente Municipal Luis Banck, ordenó a los titulares de ambas dependencias, colaborar en todo lo necesario con la Fiscalía General del Estado en las investigaciones correspondientes.
Cabe recordar que en septiembre de 2016 ocho agentes de la policía municipal de Amozoc fueron detenidos, luego de que emboscaron a sus homólogos de la Policía Estatal que los sorprendieron supuestamente protegiendo a huachicoleros.
No obstante, los uniformados de Amozoc fueron liberados, debido a que su abogado demostró que las declaraciones de sus acusadores, presentadas ante el agente del Ministerio Público, eran idénticas y contenían incongruencias e imprecisiones.
Asimismo, en julio de 2015, el Ejército Mexicano ejerció una orden de aprehensión contra Marco Antonio Estrada López y Tomás Mendoza Lozano, respectivamente director de la Policía Estatal y jefe del Grupo de Operaciones Especiales (GOES), porque brindaban protección a bandas dedicadas al robo de combustibles.