Tras siete años y ocho meses de ejercer, primero como procurador y luego como titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Víctor Antonio Carrancá Bourguet se separó ayer del cargo y en su lugar designó a Gilberto Higuera Bernal, quien apenas el pasado viernes, sin que la opinión publica fuera informada, asumió el cargo de Fiscal de Investigación Metropolitana.
La salida de Carrancá y su relevo por parte de Higuera fue polémica por decisiones como la aprobación apresurada de una iniciativa por parte del Congreso para que el primero pudiera nombrar a su sucesor y el nombramiento al vapor del segundo como Fiscal de Investigación Metropolitana pareció solo obedecer al protocolo establecido en la nueva normativa para el caso de la FGE.
El paso de Carrancá por la FGE se ubica entre las peores gestiones en la historia reciente de Puebla. Probablemente los asuntos más graves bajo su mando en esa institución fue la generación de 306 presos políticos, el auge de los feminicidios, el aumento de la delincuencia común y el crimen organizado, en particular el robo de hidrocarburos, el asalto a trenes y otros medios de transporte.
Al frente de la Fiscalía General del Estado de Puebla está Gilberto Higuera Bernal, quien en su trayectoria cuenta con cargos a nivel federal, “además de una amplia experiencia docente que incluye diversas publicaciones”, se informó en un comunicado de la FGE.
Con respecto a su formación profesional, Higuera Bernal es doctor en Derecho por la UNAM y es maestro en Derecho Constitucional y Administrativo, además de contar con la licenciatura en Derecho por parte de la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Entre las funciones públicas desempeñadas por Gilberto Higuera Bernal destaca que: del año 2015 a 2018 fue subprocurador de Control Regional, Procedimientos Penales y Amparo de la PGR, cargo que también había desempeñado del año 2003 a 2006.