Tras concluir la jornada electoral del 1 de julio, México amanece con el rostro de júbilo y esperanza, la más grande de los últimos tiempos, con el triunfo contundente de Andrés Manuel López Obrador, el candidato presidencial de la esperanza que encabeza el proyecto trasformador que México pondrá en marcha en próximos meses.
Con el triunfo indiscutible de López Obrador, con casi de 53 por ciento de la votación emitida, México escribe una nueva página en su historia e inicia el camino hacia una auténtica democracia que los mexicanos habremos de construir con todos y para todos: los jóvenes y los viejos, estudiantes u obreros, campesinos y empresarios, amas de casa, comerciantes, científicos, artistas, empleados o académicos, intelectuales o migrantes.
Cabemos todos
Como nunca, el pueblo se volcó a las urnas, hombres y mujeres valientes y decididos salieron a emitir un sufragio que superó 62 por ciento de la lista nominal, donde Morena obtuvo resultados sin precedente, es el caso de Morelos, donde consiguió 65 por ciento de los votos; Oaxaca, 70 por ciento, Campeche, 74 por ciento y Tabasco 81 por ciento. Cabe hacer un reconocimiento al millón cuatrocientos mil funcionarios electorales y al INE que se mantuvo al margen, lo que tranquilizo cualquier posible escenario adverso.
A México le queda una tarea ingente: aliviar el dolor por los abusos del poder, el autoritarismo, el tráfico de influencias, una dramática concentración de la riqueza en pocas manos, un incremento desmedido de la pobreza, un campo rural abandonado, la depredación de los recursos naturales, sectores estratégicos de la economía entregados al capital extranjero, un profundo agravio por la corrupción y la impunidad, una enorme ola de violencia e inseguridad, y el abandono de los sectores más vulnerables de la sociedad.
El proyecto alternativo de nación encabezado por López Obrador tiene la encomienda de la mano con todas y todos los mexicanos de recuperar democráticamente al Estado y convertirlo como promotor del desarrollo político, económico y social del país; sostener un autentico Estado de derecho donde se garanticen las libertades a favor del diálogo, la diversidad y el respeto a los derechos humanos. Establecer un Estado de bienestar que contribuya a mejorar la calidad de vida de los sectores más desprotegidos. Integrar a los jóvenes a la educación superior y a la vida productiva, rescatar al campo rural por su importancia social y cultural, recuperar la soberanía alimentaria, recuperar el dominio de los recursos naturales y la biodiversidad como patrimonio nacional, renovar la calidad de la educación; recuperar los valores culturales, morales, espirituales y la felicidad del pueblo de México.
AMLO, el líder social carismático, tenaz, perseverante, inteligente y abnegado, que supo mantenerse con espíritu renovado al levantarse una y otra vez, logró identificarse y apropiarse del sentir de las mayorías del pueblo, llevándolo al triunfo presidencial por la vía pacífica y democrática, haciendo historia junto a los miles de activistas, simpatizantes, dirigentes, brigadistas, intelectuales y ciudadanos que consagraron su vida a una noble causa: el renacimiento de México.