Pretenden construir tres hidroeléctricas en los límites de Veracruz y Puebla: Juárez

Al menos tres hidroeléctricas estarían por construirse en los municipios veracruzanos de Tlapacoyan y Jalacingo, colindantes con la Sierra Nororiental de Puebla, y servirían para abastecer de líquido a proyectos mineros en Teziutlán, informó Aurora Juárez Barrientos, una de las principales opositoras a dichos proyectos.

Juárez Barrientos ha iniciado contactos con organizaciones poblanas que se oponen a los llamados “Proyectos de Muerte”, como la Unión de Cooperativas Tosepan Titataniske –que trabaja principalmente en Cuetzalan del Progreso–, y la asociación civil Tetela Hacia el Futuro, que se resiste a la apertura de la mina Espejeras, por parte de la empresa Frisco, que encabeza el magnate Carlos Slim Helú.

La idea, explicó, es generar una organización a nivel nacional que se oponga a la explotación minera y de otros proyectos que devastan los recursos naturales.

De hecho, la activista jarocha estuvo recientemente en Puebla para acompañar a los miembros del Consejo Tiyat Tlali y a vecinos de Olintla, quienes ofrecieron una rueda de prensa para dar a conocer las vejaciones a que han sido sujetos por personeros del Grupo México, que pretende edificar una planta hidroeléctrica en la ribera del río Ajajalpan.

En el marco de esa conferencia, Juárez Barrientos fue entrevistada por La Jornada de Oriente y explicó:

“Estamos juntando firmas porque los ciudadanos no quieren que se construyan las hidroeléctricas, pero han aparecido firmas en Semarnat de Xalapa, Veracruz, donde dicen que hay más de 3 mil firmas de ciudadanos que estamos autorizando la construcción de las hidroeléctricas, y eso es mentira, porque nosotros hemos hablado con la gente y nadie quiere que se construyan por el impacto que van a ocasionar, porque Jalacingo es un pueblo agrícola”.

Aunque no pudo identificar a la o las compañías que están promoviendo las tres hidroeléctricas, la declarante afirmó que sus emisarios quieren hacer pasdar a Jalacingo y Tlapacoyan como localidades forestales, pero “allí cultivamos maíz, frijol, naranja, café, hay ganado. Entonces es una mentira que no sea agrícola”, aseveró.

Aurora Juárez Barrientos recordó que en 1999 los vecinos de Tlapacoyan detuvieron el proyecto de una hidroeléctrica que ahora está nuevamente en marcha.

Rememoró también que en aquella ocasión el consorcio que quería hacer el embalse les ofreció a los campesinos, a cambio de que vendieran sus predios, “que iba a haber escuelas, canchas, albercas, caminos pavimentados, iba a haber mucha obra, obra que como se ha dicho, es obligación darla el gobierno a las comunidades, para eso está el ramo 33, por ejemplo, las autoridades son las que tienen la obligación de apoyar en obras a los pueblos, pero ellos (las compañías) anuncian obra en las comunidades”.

Historia

Aunque en 2011 la Suprema Corte de Justicia de la Nación otorgó un amparo a los pobladores de Tlapacoyan y Jalacingo para frenar los trabajos de la construcción de dos presas en ese municipio, la empresa inició trabajos nuevamente luego de cambiar el nombre del proyecto y modificó algunos aspectos del plan original; la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales delegación Veracruz aprobó el cambio de uso de suelo de terrenos forestales, construcción y operación de la Minicentral Hidroeléctrica PH1 y PH3, luego de que el gobierno, a través de la Secretaría del Medio Ambiente estatal, no se inconformó en la nueva autorización, según La Jornada de Veracruz.

En la Gaceta Ecológica (Separata N°DGIRA/05/12) de la Semarnat se publicaron los resolutivos emitidos en las delegaciones federales de la Semarnat, del 25 al 31 de octubre de 2012, entre ellos la emitida por la delegación Veracruz que preside Manuel Molina Martínez: con la clave 30VE 2012FD114 proyecto H1 S. R.L de CV, cambio de uso de suelo de terrenos forestales, construcción y operación de una minicentral hidroeléctrica PH1 en el municipio de Jalacingo, MIA Particular y 30VE2012FD115 proyecto H3, minicentral hidroeléctrica, MIA Particular.

Las dos Manifestaciones de Impacto Ambiental (MIA) autorizadas tienen una vigencia de 50 años que se otorgan, 39 meses corresponden a las etapas de preparación del sitio, construcción y puesta en servicio y el resto para la operación y mantenimiento, que podrá llevarse a cabo un día después de publicada la autorización, por lo que la empresa ya tiene autorización para reiniciar trabajos.

Lo anterior fue autorizado pese a que el 16 de noviembre de 2011 la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró inválidos los procedimientos de evaluación de impacto ambiental que fueron tramitados ante la Semarnat, mediante los cuales se autorizó la construcción de dos hidroeléctricas en el municipio de Jalacingo.

La Primera Sala de la SCJN emitió un fallo a favor de la controversia constitucional promovida por Tlapacoyan contra la autorización de la Semarnat a empresas particulares para construir hidroeléctricas sobre el cauce del río Pancho Pozas, que atraviesa ese municipio y otras localidades.