El titular de la Coordinación General de Ecología (CGE), Efraín Flores Hernández descartó cualquier posibilidad de que este año se aplique en la entidad una campaña de condonación de multas a personas que no hayan verificado sus vehículos, pues consideró que sería injusto para los automovilistas cumplidos.
En cambio, adelantó que planteará a la Secretaría de Planeación y Finanzas (SPF) la aplicación de un programa de excepción de multa, a través del cual los automovilistas que no estén regularizados en la verificación de sus unidades vehiculares paguen por lo menos dos Unidades de Medida Aplicables (UMAs).
El funcionario estatal recordó que de los 250 mil automóviles dados de alta, el año pasado solamente verificaron 150 mil, es decir, entre el 55 y 60 por ciento del total, entre otras cosas por los problemas de tipo técnico que enfrentaron algunos Centros de Verificación Vehicular.
Sobre la condonación de multas por no verificar, comentó que “es un tema que hemos insistido con los concesionarios y hemos hecho un llamado a los ciudadanos en el sentido de qué pasa con aquellas personas que son responsables y cumplidos y que, de manera oportuna, cada semestre verifican sus carros”.
Por el contrario, señaló que hay ciudadanos que de alguna manera dejan pasar no un semestre sino uno o dos años esperando a que llegue un programa de condonación de multas, entonces “van y verifican como si nada pasara. Lo que estamos tratando de llegar con la Secretaría de Finanzas es hacer un programa de excepción a la multa, en donde todos aquellos que deseen regularizarse tendrían que pagar por lo menos dos UMAs”.
Flores Hernández expuso que a través de este esquema, los automovilistas incumplidos tendrán que hacer “un pago mínimo, porque es el propósito de que se vaya haciendo conciencia entre los ciudadanos de la necesidad de que se vayan haciendo responsables”.
El titular de la CGE recordó que cada año los centros de verificación deben actualizar sus sistemas con los datos que les envía la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) sobre las características de los vehículos que están siendo producidos por las empresas automotoras.
“Estas actualizaciones aunque parecieran muy sencillas y muy simples tienen un cierto grado de complejidad, primero porque la Semarnat nos manda todas las características de los vehículos que las empresas automotoras están produciendo, estos nuevos vehículos deben entrar al software para ser verificados, si no cómo los verificamos”.
“Se debe contar con información sobre los máximos permisibles de los autos para que puedan circular, todos los años se tienen que ir actualizando el software y es cuando en algún momento llegamos a tener retrasos de dos o tres días por estas actualizaciones, pero afortunadamente este año no nos representó más allá de una semana hacer las actualizaciones y en estos momentos están operando sin ningún problema los centros de verificación”.