Entre 2008 y 2017, el estado de Puebla registró al menos 359 muertes derivadas de accidentes laborales, de las cuales ocho ocurrieron durante el año que recién concluyó; de esa cantidad, 346 de los fallecidos eran del sexo masculino y 13 del femenino, así lo revela un reporte preliminar de la secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).
Durante el año anterior, fueron un mínimo de ocho personas las que murieron en territorio poblano, como consecuencia de incidentes ocurridos en los centros donde prestan sus servicios.
De esta forma, la entidad empata con Aguascalientes y Veracruz en el tercer lugar a nivel país con el mayor número de decesos. Anteceden Jalisco, con 14; y Guanajuato, con 3.
En la cuarta posición se encuentran Colima, Chiapas y estado de México, con siete cada uno: Sinaloa, seis; Baja California, Durango, Michoacán y Sonora, con cinco; en tanto que el Distrito Federal, Hidalgo, Nayarit, San Luis Potosí y Querétaro, tuvieron una incidencia de cuatro.
Chihuahua y Tabasco registraron tres; Morelos, Tlaxcala, y Yucatán, dos; con un fallecimiento por accidente de trabajo en sus respectivos territorios, se ubican Aguascalientes, Baja California sur, Guerrero, Oaxaca, Quintana Roo, Tamaulipas y Zacatecas.
Las únicas entidades federativas que registraron cero decesos, fueron Campeche y Coahuila.
2017 marcó un significativo deceso para Puebla en defunciones por accidentes laborales, ya que en 2008 registro 52 muertes por esta causa; 41 en 2009, 38 en 2010; 40 en 2011; 32 en 2012, 37 se registraron en 2013, otras 35 en 2015, y en 2016 fueron 41.
Respecto a los propios incidentes ocurridos en Puebla, la STPS refiere que de 2008 a 2017 se han registrado un total de 114 mil 850.
De esa cantidad, al menos 2 mil 768 ocurrieron durante el año pasado, 12 mil 353 en 2016, 13 mil 433 en 2015, 12 mil 373 durante 2014, 12 mil 654 en 2013, y 13 mil 81 a lo largo de 2012.
La secretaría refiere que los actos más inseguros y recurrentes en los espacios de trabajo, son: falta de atención a la base de sustentación o sus alrededores, falla al asegurar o prevenir, fallo o acto inseguro de terceros, hacer inoperantes los dispositivos de seguridad, así como limpiar, engrasar, ajustar o reparar equipo móvil con carga eléctrica o presurizada.
Otras omisiones en las que incurren los trabajadores, consisten en operar o trabajar a velocidad inseguridad, comportamiento inapropiado, uso inadecuado de las manos y otra partes del cuerpo, colocar, mezclar o combinar de forma insegura; y no ocupar el equipo de protección personal disponible.
Estas deficiencias han generado 3 millones 800 mil 550 accidentes de trabajo en todo el país, en el periodo que abarca de 2008 a 2017, aunque fue mayor incremento de casos se presentó en el 2012, cuando sumaron 428 mil 431 casos reportados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social.