La madrugada de este martes, colapsó el drenaje del Hospital General del Sur que pertenece a la Secretaría de Salud del estado (Ssa) inundando de materia fecal quirófanos del área de Urgencias.
Así lo denunciaron trabajadores que enviaron imágenes a esta casa editorial sobre los daños causados al interior del nosocomio.
Los informantes revelaron que en el área de Urgencias tuvieron que trasladar a los pacientes al cuarto piso del hospital para evitar un problema mayor en su salud, al representar un “foco de infección”.
Asimismo confirmaron la suspensión de algunos servicios como laboratorios, para evitar la contaminación de los reactivos.
Incluso, el personal que labora en el Hospital del Sur colocó una pancarta sobre camillas en las que se lee: “agua con excremento”.
Los declarantes aseguraron que no es la primera vez que ocurre este tipo de inundaciones, pero esta ocasión las afectaciones han sido mayores.
Por esta razón, demandaron al gobierno del estado que ponga atención a este problema y lo resuelva, pues se pone en riesgo la vida de los pacientes.
Informaron que también se vio afectado por las aguas negras la sala de espera, el área de caja y la zona de la cafetería del hospital que se ubica junto a la Unidad Habitacional Agua Santa.
Para frenar el paso y evitar infecciones, los trabajadores colocaron una cinta color amarillo con la palabra “Precaución” y se apilaron algunas camillas y sillas a manera de muro de contención.
En una videograbación que circula en redes sociales se observa que las aguas negras salen de uno de los sanitarios del hospital, donde con toallas improvisaron una barrera para impedir que el agua se extienda.
Hasta el momento, la Secretaría de Salud del estado no ha emitido postura al respecto sobre la suspensión de los servicios.
En el año 2014 se realizó una corrección al problema del drenaje del Hospital General del Sur, y en esa ocasión también se dio mantenimiento de los elevadores.
A tres años de los trabajos, el personal del nosocomio confirmó que no se ha vuelto a dar mantenimiento al edificio.
En junio pasado, el periodista Fermín García y responsable de la columna “Cuitlatlán” reveló que el “jugoso negocio” entorno a la renta de la sala de hemodinámica del Hospital General Sur de la ciudad de Puebla, donde desde hace seis años no sólo se combina el tráfico de insumos –que tienen costos monumentales–, sino además da atención a enfermos del sector privado en instalaciones públicas, a cambio de ganancias de varios millones de pesos.
Dijo que esto ocurre con una amplia red de cómplices y protectores del más alto nivel de la Secretaría de Salud.