La tarde de este miércoles, el pueblo de San Bernardino Chalchihuapan y algunos representantes de las organizaciones sociales rindieron un homenaje póstumo al niño José Luis Tehuatlie, asesinado hace tres años de manos de la policía estatal, y reafirmaron su solidaridad y compromiso con la familia de Elia Tamayo en la exigencia de justicia.
Durante todo momento, el homenaje luctuoso estuvo espiado por al menos una docena de policías del municipio de Santa Clara Ocoyucan, al que pertenece esta junta auxiliar, a bordo de dos patrullas.
Incluso en el ingreso de la comunidad estuvo varada una camioneta con seis agentes, que después ingresaron al poblado y efectuaron varios rondines en torno a la explanada principal para videograbar, desde sus teléfonos celulares, el desarrollo de las actividades.
Alrededor de las 16:30 horas la comunidad ofreció una misa en la explanada de la presidencia auxiliar, encabezada por Jerónimo, padre de José Luis; su esposa Elia Tamayo; así como por Araceli Bautista, madre del ex presidente auxiliar Javier Montes Bautista, quien se ausentó a pesar de estar en libertad y vivir en la localidad.
El vicario de Chipilo, Inocente Flores, fue corregido por la misma población, luego de señalar que el menor falleció, sin reconocer que fue asesinado por agentes estatales.
En su sermón, el prelado destacó que “con la guerra no se obtiene la paz”, en alusión a la represión que padeció el pueblo de Chalchihuapan.
Asimismo, pidió porque “José Luis sea intercesor de esta comunidad que frecuentemente lo necesita”.
Posteriormente, a las 17:20 horas, el medio centenar de personas que acudió a la homilía respaldó a la familia Tehuatlie Tamayo en una procesión con flores a la tumba del menor.
Después de dejar la ofrenda, la gente caminó del panteón de la comunidad al puente de la carretera que comunica con el municipio de Atlixco, donde se libró el enfrentamiento hace tres años, para efectuar un acto simbólico en la cruz de José Luis.
De regreso a la explanada principal, casi a las 19 horas, Araceli Bautista tomó la palabra y denunció que a pesar del boicot por parte de la agrupación Antorcha Campesina, se logró efectuar el homenaje póstumo a José Luis.
La mujer recalcó que el asesinato del menor no debe quedar impune ni en el olvido, por lo que seguirán exigiendo justicia.
Fue entonces que Elia Tamayo accedió a dar una entrevista a los pocos medios de comunicación que se dieron cita en el acto. “Sigo pidiendo justicia y castigo a los responsables, tres años después del asesinato de mi hijo”.
Elia acusó que el ex gobernador Rafael Moreno Valle Rosas incumplió con los 11 puntos recomendatorios que emitió la CNDH, y a pesar de ello “se alaba diciendo que sí lo hizo, pero no fue así. Yo creo en la justicia divina”.
La madre de José Luis también exigió la renuncia del fiscal de Puebla, Víctor Carrancá Bourget por la serie de irregularidades y el abuso de autoridad que cometió en el caso Chalchihuapan.
“Bien que nos pudo envolver, tomó nuestra confianza y después se aprovechó de nosotros”, refirió, mientras servía platos de arroz y mole que su familia convidó a la comunidad y visitantes.
Después vinieron las actividades artísticas: música y bailes populares con la participación de integrantes del Centro Libre de Experimentación Teatral y Artística de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y la cantante de música de protesta y activista Amelia Escalante.
Entre las organizaciones invitadas se pudo ver a Jorge Méndez, del Movimiento Nacional por la Esperanza, militantes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), así como del Movimiento Ciudadano en Defensa de Jolalpan.
El 9 de julio del año 2014 en el poblado de Chalchihuapan un niño de 13 años de nombre José Luis Tlehuatlie Tamayo fue impactado por una bala de goma que disparó la policía estatal en represión a un movimiento social que exigió la reinstalación del Ministerio Público.
Aunque el niño no participó en la protesta, al salir de la secundaria fue alcanzado por una bala hiriéndolo de muerte. 10 días después falleció en el Hospital General del Sur a causa del impacto que lo dejó en agonía.
“Ni perdón ni olvido”: Molacnats
El Movimiento Latinoamericano y del Caribe de Niñas y Niños y Adolescentes Trabajadores (Molacnats) y Comunalidades advirtió que no perdona ni olvida el asesinato de José Luis Tehuatlie.
“No perdonamos y no olvidamos, hacerlo permitiría que la impunidad, la corrupción y el autoritarismo se impongan sobre la justicia, la libertad y la dignidad. La vida de nuestro compañero no es negociable y rechazamos cualquier acción que coloque a José Luis y su memoria como una moneda de cambio”, arguyó el organismo internacional.
En un comunicado, Molacnats acusó que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en México es cómplice de negociar la impunidad ante el asesinato de José Luis.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos por medio de la recomendación número 2VG/2014, expediente número 1/2014/4555/ Q/VG, determinó la responsabilidad del gobierno de Puebla en los hechos.
Sostuvo que, sin embargo, hasta el momento no se ha cumplido a cabalidad con la recomendación emitida y, a pesar de ello, esta instancia cerró el expediente en diciembre de 2016 en complicidad con el gobierno de Puebla.
A tres años del asesinato de José Luis, Molacnats aseguró que este se mantiene impune.
“No hay una sola persona sentenciada por lo ocurrido a José Luis, los principales responsables, Rafael Moreno Valle, concluyó su periodo como gobernador del estado sin recibir ningún tipo de castigo e incluso se postula como candidato a la presidencia de México”, condenó el Movimiento Latinoamericano.
Incluso, reclamó que el ex secretario de Seguridad Pública del estado y quien comandó el operativo en Chalchihuapan, Facundo Rosas Rosas, “solo recibió una multa, que nunca pagó, abandonó el gobierno de Moreno Valle en medio de la sospecha y la investigación por el robo de combustible en la entidad”.
Ambos –señaló– disfrutan de la impunidad que se vive todos los días en México.
“Quienes integramos este esfuerzo a favor de los derechos de la infancia y la adolescencia, en coordinación con líderes de opinión y expertos internacionales, buscamos compartir nuestra profunda preocupación por las afectaciones que están enfrentando niñas, niños y sus familias ante la violencia y violación de derechos en el estado de Puebla y en el resto del país”, se lee en el escrito.
Informaron que por medio Movimiento Latinoamericano y del Caribe de Niñas, Niños y Adolescentes Trabajadores y Comunalidades siguen exigiendo que José Luis y su familia tengan un debido acceso a la justicia, que se castigue a los responsables y se tomen las medidas pertinentes para garantizar la no repetición del daño.