A menos de una semana que concluya este sexenio, el Banco Estatal de Tierras se niega a pagar el derecho de vía a 50 pobladores del municipio de San Matías Tlalancaleca, a quienes despojó de sus terrenos de cultivo para construir una carretera que comunica a la autopista México-Puebla a la ex hacienda de Chautla, hoy convertida en un hotel de la cadena Misión.
Los labriegos advirtieron que esta semana iniciarán protestas frente a las instalaciones del fideicomiso público, pues argumentaron que el titular Juan José Méndez de León les dijo que se acabó la gestión y no cuentan con recursos para liquidarles.
En 2014, denunciaron que fueron amenazados por el personal del Banco de Tierras para que entregaran parte de sus predios, por los que pagarían entre 500 mil y hasta un millón de pesos, o de lo contrario serían expropiados.
En entrevista, los agraviados destacaron que no sólo se trata del adeudo económico, sino que además el Banco de Tierras tampoco les ha entregado las escrituras de sus terrenos para tener certeza jurídica que la parte que no se utilizó regrese a sus dueños.
Por esta razón, dijeron que se plantarán en las oficinas del Banco de Tierras hasta sacar un acuerdo para el pago inmediato de sus tierras.
Hace dos años, expusieron que personal del Banco se acercó a la población de San Matías Tlalancaleca para comprar predios en las inmediaciones a la autopista México-Puebla, con la ex hacienda de Chautla, donde pasa la nueva supercarretera.
“La carretera ya se construyó y es el momento que el Banco no nos da la cara ni las escrituras, lo cual ha generado preocupación y molestia entre las familias que fuimos afectadas”, declaró a esta reportera uno de los propietarios, quien pidió el anonimato para frenar posibles amenazas.
Incluso, recordó que la inauguración de la obra estuvo a cargo de la ex secretaria de Turismo Federal, Claudia Ruiz Massieu, y por el gobernador del estado, Rafael Moreno Valle.
“Dijeron que esta carretera fortalecerá la oferta turística y la economía de nuestros pueblos, pero la realidad es otra. Este gobierno nos despojó de la tierra y nos está dejando más pobres que antes”, reclamó.
Además desmintió que la obra haya generado 360 empleos directos e indirectos para los lugareños, como presumió la autoridad.
Del medio centenar de pobladores, precisó que ninguno ha recibido ningún beneficio por parte de las autoridades, a pesar de las promesas hechas por el fideicomiso.
El declarante aclaró que la tierra sigue siendo propiedad de las familias de Tlalancaleca, pero no han recibido las escrituras que los amparen como dueños porque se encuentran en poder del organismo. Tampoco el recurso prometido por permitir que la carretera pasara en medio de sus terrenos.
Cansados de esta situación, informó que se manifestarán en el Banco Estatal de Tierras hasta que haya una respuesta. “No nos queda de otra, ya pasaron dos años y siempre nos ponen trabas”.
La obra carretera fue concluida cinco meses después de ejecución, y aunque en un inicio se dijo que costaría 61.9 millones de pesos, al final la inversión total fue 11 millones de pesos más de lo planeado. Es decir, el costo total fue de 72.9 millones de pesos.
La vialidad tiene una longitud de 2.3 kilómetros y reduce el tiempo de traslado tanto para quienes se transporten de la capital poblana al lugar, como para quienes viajen de otras partes del país a través de la autopista México-Puebla.
