Se trata de pugnar las ideas de género. Decir que la mujer no es sumisa ni que el hombre está vedado a expresar sus sentimientos. Más que dramática la propuesta es cómica, para poner en claro que es necesario reflexionar y parar la violencia y el machismo.
Se trata de la obra Destruyendo castillos, que en única función se presentará el próximo 19 de diciembre en el Teatro del Complejo Cultural Universitario (CCU) con entrada general de 120 pesos.
Dicho montaje es resultado de “Alas teatro”, un proyecto universitario dirigido por Ángel Mancilla, asistido por Andrea Loranca y producido por Tania Noriega, quien en un papel doble personifica a la princesa y al príncipe.
La pieza, explicaron Mancilla, Loranca y Noriega, es una adaptación del texto La bella durmiente, de la dramaturga austriaca Elfriede Jenilek, quien propone que tras despertar de un largo sueño la princesa se encuentra al lado de su príncipe, al cual no esperó ni desea.
El conflicto, dijo la actriz Tania Noriega, reside en que ambos personajes se encuentran y no se reconocen como pareja, más que como humanos envueltos en una serie de nocivos paradigmas de género.
Si bien el monólogo es una crítica a los cuentos de hadas promovidos por la literatura en historias de autores como Charles Perrault y continuados por la cinematografía hollywoodense a través de Disney, la obra va más allá, como propuso el director Ángel Mancilla.
Ello, continuó, porque su crítica se extiende hacia los cánones generados a partir de lo masculino y lo femenino, a lo varonil y lo sumiso que se presupone existe en ellos, para encararlos y decir que al final se trata de hombres y mujeres que son por igual fuertes, valientes y sensibles.
El proponerla como comedia, prosiguió Ángel Mancilla, responde a que ese género “hace más digerible” temas de este tipo. “¿Obtendrán su felices para siempre o ambos perecerán bajo los escombros del castillo?”, cuestionará el monólogo.