No son funcionarias porque la ley establece que las y los presidentes de los sistemas municipales DIF ocupan el cargo de manera honoraria, pero cobran y cobran bien. Al menos ocho de las 15 Comunas más grandes en el estado, las esposas y familiares de los alcaldes y funcionarios públicos reciben un salario que va de los 10 mil a los 35 mil pesos mensuales, es decir, más de la mitad.
Y decimos que al menos ocho de los 15 municipios que por obligación legal deben tener pública su nómina, ya que son los únicos que han reconocido que las presidentes de los patronatos DIF cobran quincenalmente por salir en la foto abrazando niños o ancianos.
De los siete restantes solo Huauchinango y Puebla han afirmado que las esposas de los ediles no cobran por estar al frente del DIF de su municipio.
En otros tres municipios, Amozoc, Tepeaca y San Andrés Cholula, han ignorado las peticiones de información realizadas al amparo de la Ley de Transparencia, mientras que en Xicotepec burlaron el procedimiento poniendo a disposición la información, lo que en la práctica cancela el derecho, pues la demarcación se encuentra en los linderos del estado.
Por último, en Teziutlán la Comuna que gobierna el panista Antonio Vázquez Hernández no cuenta con una dirección electrónica a la cual dirigir las solicitudes de información, lo que cancela la posibilidad de pedir documento alguno en esa región.
Lo anterior no significa que las mujeres que ocupan la posición de presidentes del patronato no cobren en esos cinco municipios, solo que las vías que tiene cualquier ciudadano para exigir cuentas a sus gobernantes no funcionan o están canceladas.
En cambio, Izúcar de Matamoros, Atlixco, San Pedro Cholula y Zacatlán tienen la información en su página, otros como Tehuacán, Cuautlancingo, Tecamachalco y San Martín Texmelucan dieron a conocer a regañadientes los datos tras una solicitud de información que presentó este reportero.
35 mil pesos o más…
A pesar de que la ley sobre el Sistema Estatal de Asistencia Social, que rige a los Sistemas Municipales DIF es muy clara al señalar que el cargo de presidente del patronato es honorario, hay quien cobra y no poco por estar en el cargo.
El artículo 23 fracción IV de la ley citada plantea: “Los miembros integrantes del patronato no recibirán retribución, emolumento o compensación alguna por su participación voluntaria y por ende no serán considerados servidores públicos.”
En tanto que el Reglamento Interior del sistema municipal DIF señala en su artículo 10 una cosa muy similar: “El carácter de miembro del patronato será personal y honorífico”.
Pero eso no impidió que el presidente municipal de San Martín Texmelucan, José Rafael Núñez, nombrara a su esposa, Emilia Sofía García Díaz, como presidente del patronato, asignándole un salario de 35 mil 700 pesos mensuales, según reconoció el ayuntamiento de ese municipio al responder una solicitud de información (folio SAI/0017/2015).
Mil pesos menos de lo que gana un regidor en aquel municipio, ubicándose además como el tercer salario más alto, solo después del presidente municipal y de los regidores.
Aunque de acuerdo con lo publicado en junio del año pasado por el portal regional proyectocinco.com, el pago podría ser mucho más alto, e involucrar además actos de nepotismo.
El reportero Pedro Alonso dio a conocer, retomando información de una nómina del DIF municipal que fue publicada en las redes sociales, que García Díaz “gana 43 mil 384.72 pesos al mes; sus hermanas, Norma como asistente de presidencia, gana 8 mil 235.82; Fabiola, como directora de planeación y proyectos, 11 mil 324.36; su sobrina Eunice Tame García, como jefa de la secretaria de pensiones, 10 mil 370.66. Asimismo, la prima del presidente, Guadalupe Núñez Vargas, con el cargo de jefa de Servicios Administrativos, 11 mil 324.36; su primo Bernardino Núñez Díaz, quien es director del CRI, obtiene 12 mil 529.98”.
En San Pedro Cholula, la historia se repite; el edil José Juan Espinosa nombró a su hermana María de Carmen como titular del organismo, pues su esposa Nancy de la Sierra ocupa la delegación estatal del programa Oportunidades, asignándole un salario mensual neto de 30 mil 639 pesos.
Una remuneración que supera la de los regidores y solo está por debajo de la del titular de Obra pública del municipio, quien cada mes cobra 33 mil 803 pesos, y la del propio alcalde, quien recibe 40 mil 939 pesos, la información se puede consultar directamente en la página del ayuntamiento.
En la línea de los 30 mil pesos mensuales está también María del Carmen Lezama Cordero, esposa del alcaldede Izúcar de Matamoros, y por debajo de esa línea están los titulares de Tehuacán, Luis Felipe Hernández Martínez, recién egresado de la licenciatura en Derecho, quien es hermano del regidor de Industria y Comercio de ese municipio y recibe 24 mil pesos, y Elvia Siliceo Bernardi, esposa del alcalde de Atlixco, José Luis Galezzi, quien mes con mes recibe 23 mil 810 pesos.
Tendrían que desaparecer: Lilia Vélez
Para Lilia Vélez Iglesias, coordinadora de la carrera de Comunicación en la Universidad Iberoamericana Puebla, la figura de las presidentes de los sistemas DIF, sean estatales y municipales, tendría que reglamentarse formalmente o incluso desaparecer como puesto honorario para integrarse en la estructura de gobierno, con un salario fijo pero también con obligaciones legales y un perfil profesional claro.
“Una de las cosas que ya tendría que reglamentarse, o establecerse ciertos lineamientos, es el papel de las esposas de los presidentes, porque me parece que tiene que ver con una concepción muy del pasado. Me refiero a que generalmente son mujeres que no tienen una carrera pública previa, y que solo son porque han sido las esposas de, y como esposas del jefe del Ejecutivo en cualquiera de los tres niveles de gobiernos, pues adquieren ese papel, que es público y está financiado y sostenido con recursos del erario. Finalmente las actividades que ellas realizan, el personal a su cargo, porque normalmente tienen asistentes, asesores y demás, y ahora la publicidad que se hace de sus actividades se nos carga a los contribuyentes”.
Y agrega: “Esta figura de presidente del patronato me parece que tendría que desaparecer; creo que las mujeres no debemos ser algo en torno a nuestra relación civil, esto es una herencia del pasado patriarcal con una relación jerárquica patriarcal”.
“Si la esposa del gobernador, del alcalde o del presidente de la República quiere hacer actividades con recursos públicos, pues que se asuma como servidora pública y que se someta a todo el marco jurídico de los servidores públicos y que sea la directora del DIF y no la presidente del patronato”.
Pero, apunta, si se va integrar como funcionaria pública es importante que tenga conocimiento en la materia “y que tengas un perfil adecuado para el puesto que desempeñas, de otra manera se corre el riesgo de que lo que digas o lo que hagas no sea lo más pertinente para la función que desempeñas”.
¿Una práctica generalizada?
La revisión de nóminas, y la petición de información se realizó solo en los municipios más habitados y que por ley están obligados a contar con una página de transparencia, lo cual deja fuera a 202 municipios poblanos.
Eso no significa que ahí las esposas y familiares de los ediles no cobren, y para ejemplo un botón: el 18 mayo de este año el reportero Arturo Manzano dio a conocer a través del portal municipiospuebla.com.mx que “la presidente del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia de Ocoyucan, Jovita Romero Morales, tiene un sueldo mensual de 45 mil pesos, cantidad superior a los 40 mil pesos que gana en ese mismo periodo un regidor de ese lugar”.
El dato le fue revelado por la pareja sentimental de la mujer y alcalde del lugar Francisco Simarrón Ocotoxtle.
“Mi esposa también está en nómina, ella está ganando 45 mil pesos por el DIF; por presidente del DIF. Nosotros como presidentes no nos hemos subido el sueldo, sino todo lo contrario, he tenido una reunión con mis regidores y les he comentado que nos bajemos el sueldo todos para dar una mejor apariencia y usar ese dinero para dar a los señores una despensita, porque aquí se requiere mucho”.