Al tiempo de exigir que se investigue el acoso del gobierno estatal denunciado por académicos de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), el director general del Instituto de Ciencias Jurídicas (ICJ), Germán Molina Carrillo, reveló que por la postura crítica que ha asumido como representante de dicha institución educativa ha sido sometido por parte del gobierno estatal a revisiones rigurosas en el pago de obligaciones fiscales estatales y el cumplimiento de servicios, que podrían considerarse como hostigamiento.
Molina Carrillo dijo que la administración que encabeza Moreno Valle no ha podido tomar represalias en su contra, porque el Instituto de Ciencias Jurídicas ha cumplido en tiempo y forma con sus obligaciones legales y dijo que las posturas críticas expresadas desde la academia no deben ser tomadas con criterios políticos y reprimidas por las autoridades.
“No se puede hablar de una sociedad democrática si no se da respeto a las opiniones que pueden ser críticas, pero que muchas veces, en el caso de los académicos, tratan de ser propositivas. Es decir, el trabajo académico separarlo de la parte política, porque a mí me parece que aquí sí se toman las cosas por parte de las autoridades estatales con un criterio político, pues lo académico queda por los suelos”, expresó en una entrevista, cuando se le preguntó sobre los acosos denunciados por maestros de la UPAEP y directivos de la Universidad de las Américas Puebla.
“Se tiene que revisar ese tipo de denuncias, se tiene que investigar a fondo, sería muy lamentable que existiera por trasfondo político una represión por el trabajo académico, si hay una reforma, cuál será el ejemplo. No puede ser una política de Estado reprimir las opiniones diferentes, de académicos, vicerrectores, recorres y dañar a una comunidad estudiantil y de profesores”.
Desde sexenios pasados usted ha sido crítico, desde una posición académica y como abogado, de las cosas que no le parece bien que suceden en el ámbito público. ¿Usted, en particular o su institución han sufrido algún tipo de acoso en este sexenio por la posición que ha guardado públicamente? –se le preguntó.
–Mira, te puedo decir que nos han mandado algunas auditorías, nos han revisado, hemos salido adelante. Nos han revisado también administrativamente todos nuestros trámites. Si eso podría ser una forma de acoso yo te podría decir que pues sentimos que está dentro de sus facultades. Hemos tratado de transparentar todo, estamos acreditados, estamos certificados, estamos tratando de buscar una certificación internacional, yo creo que por ahí hemos ido saliendo –respondió Molina Carrillo.
–¿Pero sí siente usted que hay un sesgo, de mayor rigor en esas revisiones, llegando al acoso? –se le insistió.
–Sí lo ha habido –contestó– cosas como: te reviso el Impuesto Sobre Nómina, te realizo una auditoría de los pagos de impuestos estatales o te reviso con el ayuntamiento cómo estás en cuanto a tu funcionamiento. Si ha habido eso, no sé cómo les ha ido a otras instituciones ahí, pero mi postura crítica, si así se toma, es solo pedir espacios para los jóvenes, espacios para estudiar y espacios para trabajar, eso ha sido todo.