El 80 por ciento de la agricultura en México es familiar, lo cual habla de su importancia, sin embargo, en la última década, la fragmentación de la política pública y la apertura comercial han generado cambios radicales en la producción de alimentos, así como en los principios que sustentan la dieta de la población, a nivel nacional y regional.
Así lo dio a conocer este martes el director del Colegio de Posgraduados (Colpos), campus Puebla, Javier Ramírez Juárez.
La declaración se dio durante el anuncio de la realización del Simposio General Ciencia, Tecnología e Innovación en el Sistema Agroalimentario de México. “Hacia un Enfoque Integral de Producción-Dieta-Salud-Cultura en Beneficio de la Sociedad”, que se desarrollará en el Centro de Convenciones de Puebla los días 26, 27 y 28 de noviembre.
El foro académico se realizará en el marco del Año Internacional de la Agricultura Familiar; El Colegio de Postgraduados (CP), la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), y la Fundación Produce Puebla, A.C. (FPP).
El académico expuso que México tiene una condición privilegiada en el mundo, pues cuenta con un notable acervo histórico que concentra riqueza cultural, sustento alimentario por haber sido centro de origen de la agricultura, diversidad biológica, y abundantes recursos naturales.
Informó que las asimetrías ocasionadas por la complejidad de las políticas públicas establecidas han convertido a México en un importador agroalimentario neto, con los riesgos que ello implica: cambios indeseables en los patrones alimentarios de la población, a tal grado que en el país se tiene actualmente uno de los índices más altos de obesidad en el mundo.
Estos problemas de salud –dijo- están relacionados con cáncer, diabetes y enfermedades cardiovasculares.