Por cuestiones políticas, la Secretaría de Educación Pública del estado (SEP) ordenó impedir el ingreso a la regidora de San Vicente Coyotepec, Silvia Jiménez González, al preescolar “Ovidio Decroly” de la junta auxiliar de San Salvador Chachapa, donde imparte la asignatura de música desde hace un lustro, sin argumento alguno.
En la entrevista, la informante mostró el mensaje desde su teléfono celular, donde la directora del preescolar le pide que no se presente a trabajar, por órdenes de la SEP, y que será ella quien saque sus cosas personales de su escritorio, porque no podrá entrar a su salón de clases.
La denuncia la hizo la misma agraviada este jueves en las afueras de las oficinas centrales de la SEP, en la ciudad de Puebla, donde por segunda ocasión fue citada por la dependencia estatal para la entrega de su instrucción de reubicación de centro de trabajo, pero tampoco le fue otorgada.
“Me volvieron a decir que están muy ocupados y que me presente este viernes para que ahora sí me den mi cambio, que nunca solicité; mi temor es que tampoco me den el oficio y luego me quieran levantar un acta de abandono laboral”, advirtió.
Por lo anterior, pidió a la sección 23 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) que intervenga en su caso, pues dijo que no va a permitir que el gobierno intente quitarle su plaza.
“La secretaría no me da ni orden de presentación en una escuela de Xicotepec de Juárez y me impidió que regrese a Chachapa”, denunció la regidora, quien insistió que la reubicación de su centro laboral obedece a una represión por parte del gobierno morenovallista.
Silvia Jiménez González es regidora del municipio de Coyotepec y docente de música por las mañanas de dos centros de educación preescolar, con 17 años de servicios magisterial.
El lunes pasado, por exhibir una pancarta en un acto público del gobernador del estado, durante la inauguración del hospital del municipio de Ixcaquixtla, la SEP la removió bajo el pretexto que necesitan de sus servicios en la localidad de Xicotepec de Juárez, en plena Sierra Norte.
El cambio de Silvia Jiménez de centro de trabajo va de la región Mixteca a la Sierra Norte, con una distancia de por lo menos 500 kilómetros, es decir más de cinco horas de viaje, pues la carretera es sinuosa.
A esto se suma que la regidora de Coyotepec es una mujer sola, viuda, con un hijo de seis años de edad, que en este momento padece varicela y cuida de su madre anciana.
La represión del gobierno del estado no solo fue contra Silvia, sino también alcanzó a su hermano Eladio Jiménez González, quien es alcalde auxiliar de Zoyamazalco y miembro del Consejo Estatal en Defensa de la Identidad de los Pueblos (Cedip).
Eladio, quien es director comisionado por el sindicato, fue traslado a la comunidad de Dos Arroyos, en el municipio de Pantepec, a pesar de que cuenta con 30 años de trabajo y está a un pie de su jubilación.
La regidora argumentó que están violando sus derechos constitucionales, pues ambos son maestros, fueron electos por la población y cuentan con una comisión de su sindicato.
Silvia Jiménez fue reprendida con el cambio de trabajo por sacar una cartulina en un acto público donde estaba Rafael Moreno Valle, gobernador del estado, en el que se leyó: “Registro civil para los pueblos; presos políticos, libertad”.
Relató que de inmediato la seguridad al servicio del mandatario la abordó, la intimidó y le dijo que tenía que guardar el papel. “De manera pacífica me negué haciendo uso de mi derecho a la libre expresión”.
Ante su negativa, comentó que se le acercó el delegado de Gobierno en la región, perteneciente a la Secretaría General de Gobierno (SGG), quien también le exigió lo mismo.
Silvia Jiménez refirió que por segunda ocasión se negó a bajar su pancarta, argumentado que además era una regidora de un pueblo vecino y que también tenía derecho a manifestarse.
Expuso que luego llegó el presidente de su municipio, Alfredo Rodríguez Ocaña, quien le pidió que desistiera de su protesta, pero tampoco cedió.
“Iba vestida con una blusa con el logotipo del ayuntamiento de Coyotepec, pues veníamos de un arranque de obra, y al ver que no bajé mi cartel, la gente del gobierno me quiso arrinconar, me tomaron mis datos personales y se fueron sin mayor problema”, explicó.
Al día siguiente, el martes, informó que la supervisora de la zona le llamó por teléfono para pedirle que se presentara de manera urgente este miércoles en las oficinas de la Secretaría de Educación Pública, sin explicación ni escrito de por medio.
Al ingresar a las oficinas centrales de la Secretaría de Educación, en la ciudad de Puebla, ya era esperada por Itzel Jiménez Sánchez, jefa del nivel Preescolar, y la abogada María del Carmen López Meza, del área jurídica de la dependencia, quienes le entregaron su repentino cambio de centro laboral.