La ex secretaria de Desarrollo Social del país, Ana Teresa Aranda Orozco, anunció que se sumará a la marcha del silencio que una treintena de organizaciones sociales convocaron para el próximo domingo, con el fin de repudiar los actos de represión del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas.
La panista dio a conocer su participación al arribar a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), donde presentó su declaración sobre la denuncia por robo de documentación personal que perpetró en su vivienda un comando armado el 25 de julio pasado.
Calificó el hurto como un “acto intimidatorio” del que responsabilizó a la administración estatal, pues desde 2011 ha recibido amenazas anónimas por criticar de manera pública al mandatario poblano, al que ha tachado de autoritario y megalómano.
Aranda se presentó en punto de la 1 de la tarde en el edificio de la PGJ de la 31 Oriente, donde personal de seguridad complicó el acceso a los representantes de los medios de comunicación pese a que se trata de un inmueble público.
Al subir las escalinatas del edificio, la también ex directora nacional del DIF captó inmediatamente la atención de la veintena de comunicadores que aguardaba su llegada, a quienes expresó: “el valiente vive hasta que el cobarde quiere”.
En entrevista, aseguró que el robo de su vivienda fue un “mensaje siciliano” de la administración estatal que forma parte de una estrategia de intimidación contra los detractores de Moreno Valle, entre los que se cuentan políticos y líderes de opinión.
Dio a conocer que en el texto de la denuncia hizo responsable al gobierno del estado de cualquier cosa que pudiera ocurrirle a ella, a su familia y a sus bienes personales, pues entre la documentación que sustrajeron de su vivienda en San Andrés Cholula se encontraba su historial crediticio y médico, así como las escrituras de sus propiedades.
Aranda explicó que demoró más de una semana en presentar su declaración porque el Ministerio Público de San Andrés Cholula remitió la denuncia a la Mesa Especializada en Robo a Casas Habitación y le proporcionó una dirección incorrecta de la misma.
“Nos mandaron al edificio Bicentenario de la PGJ, llegamos ahí y nadie sabía nada. Anduvimos de Herodes a Pilatos y de Pilatos a Herodes, por fin llegamos a un tercer piso donde estaba la mesa especializada, pero no había nadie.
“Nos costó el miércoles, jueves, viernes, sábado y domingo el dar con la denuncia, lo cual fue una situación muy extraña porque normalmente cuando esto se hace se notifica al denunciante”, expuso.
Anunció que solicitaría a la PGJ dar vista a la Procuraduría General de la República (PGR) de su caso, porque el robo de su archivo configura un delito federal por tratarse de datos personales.
En ese contexto, dijo que se sumará a la marcha del domingo que partirá del centro comercial Triángulo de las Ánimas a las 10 horas, pues se dijo convencida de que en Puebla habrá “paz” hasta que se respete el estado de derecho y las libertades de los ciudadanos.