Continúa el hostigamiento contra los presos ambientalistas encarcelados por oponerse a la construcción del gasoducto Morelos en el estado. Esta vez el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua Puebla–Morelos–Tlaxcala (FPDTA–PMT) denunció que personal que labora en la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Puebla (CDH) y policías ministeriales obligan a Juan Carlos Flores Solís, recluido en el penal de San Pedro Cholula, a que firme un documento en el que pide se aplique el Protocolo de Estambul, que consiste en investigar si ha sido torturado o violentado en sus garantías.
La integrante de la agrupación, Miriam Vargas Teutle, explicó que Derechos Humanos busca desde la semana pasada que Flores Solís, quien se encuentra preso por defender la tierra y el agua en la región del volcán Popocatépetl, se deslinde de posibles acciones de torturas en su contra.
La declarante informó que el ambientalista duerme actualmente debajo de la regadera junto a otras 14 personas, debido a una sobrepoblación superior a 300 por ciento que existe en el penal de San Pedro Cholula.
Vargas Teutle señaló que Flores Solís no ha denunciado haber sido víctima de tortura ni ha solicitado la aplicación del Protocolo de Estambul, que consiste en poner en marcha una serie de reglamentos que documenten de forma efectiva la tortura, castigos y tratamientos crueles, inhumanos o degradantes, y sus secuelas.
“Juan Carlos nunca ha denunciado tortura, pero cuando inició con la huelga de hambre se prendieron los ‘focos’, y desde entonces policías ministeriales se presentan continuamente en su celda para exigirle que firme una carta para deslindar acciones de tortura hacia su persona. Esta misma actitud la ha tomado personal de Derechos Humanos”, denunció.
Miriam Vargas, quien todas las semanas acude a visitar el preso ambientalista, también informó que existe una mejoría en la salud de Juan Carlos Flores, luego del ayuno prolongado que efectuó por siete días para exigir se frene la construcción de megaproyectos en el estado de Puebla.
Por su parte, la CDH Puebla difundió un comunicado en donde informó que “periódicamente visitadores adjuntos han acudido a entrevistarse con los tres internos con la finalidad de verificar las circunstancias de reclusión, sus condiciones de salud y el cumplimiento de las medidas cautelares”.
Lo anterior luego de que se hiciera público que la luchadora social y comisariada ejidal de San Felipe Xonacayucan, Enedina Rosas Vélez, estaba siendo intimidada al interior del penal de Atlixco, por personas desconocidas que le exigen liberar el derecho de vía a favor de CFE, para la construcción del gasoducto Morelos en terrenos de cultivo de esa región.
En el boletín oficial número 52/2014, la Comisión Estatal de Derechos Humanos destaca que “personal médico valoró a Enedina Rosas Vélez y Abraham Cordero Calderón, quienes están en buen estado de salud y sin evidencia de abuso o maltrato físico”.
“Consta en las diversas actas circunstanciadas levantadas con motivo de estas visitas, que las tres personas anteriormente nombradas, manifestaron encontrarse en buen estado de salud y que no han recibido malos tratos, amenazas o intimidaciones”.
Con respecto al interno Juan Carlos Flores Solís, dijo que sonsideraba como no necesaria la revisión médica.
“La CDH Puebla continuará con las diligencias, como parte de los procedimientos de las quejas”, se lee en uno de los párrafos del comunicado.
El pasado 7 de abril fue detenido Juan Carlos Flores Solís, después de permanecer tres horas dentro de las instalaciones de la CDH Puebla, a donde acudió para presentar una queja colectiva por la detención de Enedina Rosas Vélez, mujer de 60 años de edad, a quien le fabricaron el delito del robo de dos celulares, a fin de internarla en el penal de Atlixco, sin derecho a libertad bajo caución.