De cada 100 pesos que el gasto público ejerce en educación, salud, alimentación, infraestructura y sueldo de la burocracia de todo el país, entre otros rubros, el 38 por ciento proviene de los ingresos petroleros, mencionó el senador David Penchyna Grub, presidente de la Comisión de Energía del Senado, y agregó que ello generó que las finanzas públicas de México dependan del combustible.
Durante su participación en el 14 Simposio Internacional Reto Negocios de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), dijo que “de 2012 a lo que va de 2014 hemos hecho más cambios que en los últimos 25 años a la Constitución, ya que los legisladores estamos convencidos de que es lo que México necesita para lograr su cambio”.
Como parte de su ponencia “Las Reformas estructurales aprobadas por el Senado”, agregó que de todas las reformas que se han dado en México, dos son las más trascendentales: la educativa y la energética.
“La reforma educativa es indispensable y se hizo con el fin de evaluar a los maestros y brindarles a ellos las herramientas para ser mejores”, dijo y señaló que no ha terminado ya que falta “revisar los contenidos educativos que estamos trasmitiendo en el sistema escolar nacional desde preescolar hasta la educación media superior”.
Sobre la reforma energética, el senador David Penchyna afirmó que es la más importante en los últimos 60 años en la vida política, económica y social de México.
Dio a conocer los siete fundamentos del nuevo modelo energético mexicano: “Los recursos son propiedad de la nación, el Estado como rector de la política energética, vigorosas empresas productivas del Estado, un sector abierto a la competencia, renta petrolera como palanca de estabilidad y desarrollo, responsable con la sustentabilidad y el medio ambiente y transparencia y mejores prácticas”.
Finalmente comentó que “el gran problema de la reforma energética es que en México no contamos con los profesionistas necesarios para enfrentar el reto que se demandará en los próximos 10 años en esta área”.