Con la aprobación de un Impuesto al Valor Agregado (IVA) generalizado a 16 por ciento, el número de habitantes del país que padecerá pobreza alimentaria se incrementará en 50 por ciento, y pasará de 25 millones que padecen actualmente esa condición a 37 millones de personas, señalo el investigador de la Facultad de Economía de la UAP Alberto Castañón.
Ayer, durante el foro de análisis al primer informe de Enrique Peña Nieto, el investigador advirtió que el IVA generalizado tendrá un impacto directo en la canasta básica alimentaria, y por lo tanto en la economía general de las familias.
Indicó que la canasta básica está compuesta por 54 bienes de consumo, algunos indispensables como las tortillas, el frijol y el maíz, chile, leche y otros que de ser gravados tendrían un impacto severo en el incremento de la pobreza en el país.
El incremento del IVA conllevaría a que el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) tenga que modificar sus cálculos así como sus líneas de pobreza en términos de pobreza de capacidades, alimentaria y patrimonio.
Con esa generalización del impuesto habría 12 millones de pobres más en el país que no tendrían lo más básico para satisfacer sus necesidades diarias de alimento; actualmente hay 25 millones de habitantes en México que están en esa condición, pero llegaría a 37 millones, afirmó el académico.
“Si nos vamos al total de pobres se incrementaría hasta 75 millones de pobres, actualmente somos unos 50 millones de personas que tenemos algún tipo de pobreza, que es 70 por ciento de habitantes del país”.
Destacó que actualmente algunos servicios ya cobran este 16 por ciento de IVA, pero es el Centro de Estudios Económicos Manuel Espinosa Yglesias el que está promoviendo esta iniciativa, como medida para compensar el ingreso de recursos petroleros, como parte de la reforma energética.
A cambio de incrementar el IVA a 16 por ciento en todos los productos de consumo se está ofreciendo ampliar el piso básico de bienestar; es decir, los programas sociales de ayuda como Oportunidades, 70 y más y Sin Hambre y otros, pero esto será insuficiente, estimó el economista.
“El piso de bienestar, por muy básico que sea, no va a lograr cubrir toda la recaudación del IVA ni con la reforma energética, eso es inviable. En términos contables no alcanzará lo del IVA para financiar estos programas. Con esto nos venden la idea de que sí es viable generalizar ese impuesto si se compensa con ese piso”.
En ese sentido, dijo que sería necesario observar cuántos pobres se incrementan con el IVA a 16 por ciento, para determinar cuántos millones de pesos serían necesarios para cubrir sus necesidades.