Cerca de 5 mil personas desfilaron el sábado por las principales avenidas de la ciudad de Puebla como parte de la décima marcha del orgullo, la dignidad y la diversidad sexual que este año tuvo como consigna principal la formulación y la aplicación de leyes efectivas contra la homofobia.
“Norberto Rivera, saca tu rosario de nuestros ovarios” y “No somos uno, no somos diez, pinche gobierno cuéntanos bien”, fueron algunas de las frases que se gritaban en los contingentes originarios de Puebla, Tlaxcala, Veracruz, Morelos y el DF.
Los participantes exigieron la promulgación de leyes que protejan al grupo lésbico, gay, bisexual, transexual, transgénero, travestí e intersexual (LGBTTTI) como la Ley Contra la Discriminación, la de Identidad Sexo Genérica, las Sociedades en Convivencia y La Ley del Matrimonio Homosexual.
Bajo el grito “leyes incluyentes para toda la gente”, los manifestantes recorrieron la avenida Juárez, pasaron por el Paseo Bravo, caminaron por la avenida Reforma y terminaron en el zócalo, en donde se habían instalado un grupo de voluntarios que aplicaron 300 pruebas de VIH.
En el escenario hubo música y algunos discursos por parte de los grupos participantes. Un grupo de lesbianas denunció que “viven violencia por ser quienes son”, mientras que el grupo Arcoiris Puebla, una asociación de padres con hijos homosexuales, pidió respeto hacia los integrantes de su familia “porque todos somos seres humanos”.
“No mas sangre, no mas discriminación, no más homofobia”, expresó una de las simpatizantes, quien aprovechó para citar el movimiento nacional que encabeza Javier Sicilia.
Abajo del templete, el diputado de Convergencia José Juan Espinosa Torres aseguró, en entrevista, que “Puebla no es un estado conservador, sino liberal”, ya que afirmó que “se garantiza la libertad de expresión, aunque hay algunos que pretenden mantener los ojos cerrados y que no permiten que se hagan cambios en la legislación actual”.
Denunció que por parte de algunos legisladores no hay voluntad ni disposición para abordar temas como el aborto o la unión legal de parejas del mismo sexo. “La marcha es una muestra clara de que existen jóvenes que exigen leyes más justas, por lo que urge llevar a cabo acciones que las garanticen”, expresó.
Por último, pidió que los legisladores “actúen conforme a derecho, respeten el mandato popular y dejen de evitar que Puebla pueda alcanzar la democracia”.
Por su parte, Aldo Meza Gaspar, uno de los organizadores, denunció que el presidente municipal Eduardo Rivera, aunque les dio todas las facilidades para el acto les dio a entender que “prefería que no existieran este tipo de marchas para no ensuciar las calles de la ciudad”.
En el acto se entregó una serie de reconocimientos para quienes han apoyado la marcha, que es considerada la cuarta más importante en el país. Una mención especial fue para La Jornada de Oriente, por ser el medio de comunicación local “que más da voz y voto a los homosexuales”, tal como refirieron.
