Calipan. Tras el retraso que se tuvo para la compra de la caña de más de 350 productores, finalmente se logró el acuerdo con los propietarios del ingenio de San Nicolás, en Veracruz, para que la venta se haga con la Destiladora del Golfo, anunció Joel Hernández Blanco, secretario del comité regional de la Unión Agrícola Cañera Puebla–Oaxaca,
El domingo se logró el acuerdo para así evitar que la caña sembrada siga en deterioro, pues como todo fruto, tiene su tiempo de madurez, y luego de ello comienza a perder calidad, detalló el productor.
Pero sostuvo que no debe existir preocupación entre los afectados debido al compromiso que de los propietarios de la industria en Veracruz, de enviar a personal para cuantificar los daños y pagar lo que corresponda.
Joel Hernández explicó que la propuesta llegó desde los propietarios del ingenio azucarero debido a que existen vínculos con la destiladora, de modo que fueron ellos los que pactaron la compraventa de la caña.
Son 38 mil toneladas las que se moverán hacia Córdoba, Veracruz, aunque no se descarta la posibilidad de que dentro de los próximos ocho días se pueda dar luz verde para recibir la producción en el ingenio.
Reconoció que no todos los que pactaron con San Nicolás fueron capaces de esperar a la resolución del conflicto, pues cerca de 30 mil toneladas finalmente fueron vendidas al ingenio de Calipan, por los problemas que se enfrentaron para negociar la recepción de su producto en la industria veracruzana.
Tras este anuncio es un hecho que el ingenio ubicado en esta localidad dará por concluida la zafra 2009–2010, pues sólo esperaban a que algunos otros agricultores accedieran a venderles su caña, lo cual ya no ocurrirá tras el arreglo que se signó.
Por lo que toca al precio al que les pagarán la tonelada de caña Hernández Blanco informó que se tiene calculado que sean 720 pesos, cantidad que difícilmente podrían recibir quienes vendieron al ingenio de Calipan, subrayó.
Entre los líderes de la organización existe aún la idea de que todos los conflictos generados con el ingenio de San Nicolás fueron una estrategia que se armó entre industriales de Calipan y líderes de la CNC, para tratar de obligarlos a vender su caña al ingenio local.
