Este miércoles, la periodista Mayte Noriega Fernández fue distinguida por el ayuntamiento de Puebla con la Cédula Real, que recibió de manos de la edil Blanca Alcalá Ruiz por su innovación dentro del periodismo, la comunicación y la cultura.
Tras recibir el máximo galardón que puede entregar el cabildo poblano a algún personaje, Noriega Fernández ofreció una conferencia magistral a decenas de alumnos destacados de ciencias de la comunicación de las distintas escuelas públicas y privadas que ofrecen esta licenciatura en la capital, donde hizo una severa crítica al uso de las redes sociales Twitter y Facebook tanto en el periodismo como en la vida común.
Posteriormente, encabezó la entrega de reconocimientos por mejor promedio escolar a esos estudiantes.
La presidente municipal subrayó que los medios de comunicación fortalecen las libertades, y acompañados de corresponsabilidad y ética, permiten el diálogo amplio de temas que preocupan a la sociedad.
Sostuvo que “en la construcción de un México más democrático, los medios contribuyen a reafirmar nuestra identidad. Con la entrega de este galardón evidenciamos la importancia de que en Puebla damos al ejercicio del profesionalismo, de la paz, de la comunicación y, sobre todo, al papel de las mujeres”.
Alcalá Ruiz destacó que la trayectoria de la galardonada ha sido ejemplo de pluralidad, objetividad e imparcialidad, todos elementos esenciales para el ejercicio de la comunicación.
Recordó que Noriega Fernández ha sido también poeta y articulista que en cuatro ocasiones ganó el Premio Nacional de Periodismo; además, en 1994 fue la primera mujer en moderar un debate presidencial, que repitió en el proceso electoral de 2000.
“Mayté Noriega Fernández ha entendido la función social del comunicador, convirtiéndola en constructora de espacios de encuentro, entendimientos y opinión”, aseguró la edil.
En agradecimiento por la distinción, la comunicadora definió a Puebla como una ciudad laboriosa, llena de gente capaz, entregada, que ha resistido sitios y ha emprendido batallas que le dan su grandeza.
“Me gusta Puebla por lo que veo, huelo, saboreo y disfruto. Me gusta Puebla por sus libros, por sus calles, por toda la gente que ha vivido aquí y que ha entregado su vida para legarnos una patria mejor a todos”, expresó.
El daño de las redes sociales
Noriega Fernández disertó con las decenas de asistentes al salón de cabildos del Palacio Municipal sobre la presencia de las redes sociales Twitter y Facebook en la formación de los jóvenes, así como en el ejercicio del periodismo, a las cuales definió como espacios de poca profundidad que limitan el lenguaje y por tanto el razonamiento, el debate y la crítica fundamentada.
Subrayó que los jóvenes, principalmente los que se encuentran en este momento en las universidades, padecen serias deficiencias en el uso y comprensión del idioma: difícilmente pueden redactar un texto simple de forma coherente, y menos pueden comprender una lectura, y esos problemas son arrastrados desde la instrucción primaria.
Los resultados de la prueba Enlace, señaló, son la mejor muestra de esto, y con el uso de las redes sociales se agrava más, pues el lenguaje no sólo es más limitado, sino deformado.
En el caso del periodismo, quien busca inmediatez y nada de profundidad ni análisis recurre a Twitter, pero el uso de dicho espacio puede llevar a la irresponsabilidad, entendida ésta como no dar respuesta de nada. Casos como los de las balaceras inexistentes en Tamaulipas, donde un tuitazo alertando de una de éstas provocó que cientos de madres salieran despavoridas por sus hijos a las escuelas, o como el caso del “jefe Diego”, son ejemplos del lugar al que no debe dirigirse el periodismo.
