El titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Darío Carmona García, informó que el próximo lunes vence el plazo para que el Órgano de Evaluación Independiente con Carácter Federalista (Oief) –encargado de organizar el concurso sobre la obtención de 30 mil plazas académicas en el país– brinde a Puebla el resolutivo final de los nuevos lugares que le corresponden para el próximo ciclo escolar 2009–2010.
Además, indicó que aunque no ha sido notificado el número correspondiente a la entidad, las autoridades en Puebla esperan que los lugares estimados para este año se incrementen en 400 nuevos espacios, en relación al año pasado cuando se colocaron a 600 maestros en el territorio poblano.
Carmona García destacó que el ciclo escolar entrante será el primero en el que se otorgarán plazas para personal administrativo como parte de los planes y estrategias de la Alianza por la Calidad en la Educación (ACE), que busca evitar la venta de espacios dentro del magisterio y de la dependencia.
“Hace ocho días nos reunimos los titulares de la SEP de los estados y acordamos que sería este lunes que viene, cuando la Federación y el organismo para la organización de las plazas nos diga cuántos lugares nos corresponden. Buscamos que en las 32 entidades federativas se repartan 30 mil nuevos lugares”, acotó en entrevista.
Asimismo, reconoció que son “insuficientes” las vacantes que entrega la Federación, por lo que están encabezando una negociación en la Cámara de Diputados para que se entreguen más plazas, pues la mayoría de los titulares de la SEP en los estados están inconformes con el número total por asignar.
Darío Carmona explicó que el examen de oposición –mecanismo para la obtención de las plazas docentes– busca frenar diversas prácticas ilícitas, como la venta de plazas, además, de seleccionar exclusivamente a los mejores profesores, quienes deberán acreditar sus aptitudes con el concurso nacional.
Incluso, afirmó que la estrategia de emplear el Oief para la repartición de las 30 mil plazas académicas en el país –el cual está controlado en dos terceras partes por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE)– es un mecanismo de la Alianza por la Calidad en la Educación.
“No podemos permitir que se sigan cometiendo vicios como la venta de las plazas; tenemos que echar a andar los mecanismos necesarios para vigilar este proceso y alejarlo de estas prácticas fraudulentas”, concluyó.
