La recuperación de parte del SNTE de sus edificios –que estuvieron tomados ocho meses por la disidencia magisterial– fue parte de un largo proceso que desactivó una negociación que existía entre la presidente de este sindicato de maestros, Elba Esther Gordillo Morales, con funcionarios el gobierno del estado para otorgar al Partido Nueva Alianza (Panal) una diputación de mayoría que se había programado que fuera en el distrito de Zacapoaxtla y recayera en la figura de Guillermo Aréchiga Santamaría.
Eso explica que luego de un buen inicio de campaña de Guillermo Aréchiga, quien registraba un importante repunte en la intención del voto, y de que óscar Aguilar, el candidato del PRI, se mostrara alicaído y sin apoyos, en unas cuantas semanas se revirtieran los papeles y ahora las preferencias beneficien al priista, además de contar con un importante apoyo de recursos económicos.
Si se hace un recorrido por el distrito es posible percatarse de que el Panal tiene más propaganda que el PRI. Que Guillermo Aréchiga tuvo una mejor acogida por parte del electorado que Óscar Aguilar, a quien siempre le reprocharon ser un desconocido para los electores de la demarcación, que pocos le ponían atención a sus discursos soporíferos y que Antorcha Campesina nunca quiso sumarse a su campaña.
Tal parecía que Óscar Aguilar hace mes y medio iba en picada, pues poco le ayudaba el comportamiento del nefasto alcalde de la cabecera distrital, el priistas Justino Guerrero Lillo, quien es prepotente y anda diciendo a los cuatro vientos que por ser parte del grupo político de Javier López Zavala va a ser el próximo diputado local de Zacapoaxtla, sin importar que no cumpla con los compromisos trazados al inicio de su gestión.
Entre enero y febrero trascendió que Elba Esther Gordillo Morales llegó un viernes en la noche a hospedarse en el rancho La Manzanilla, en Zacapoaxtla, el cual es propiedad de Cupertino Alejo Domínguez, quien fuera brazo derecho de “la maestra” y dirigente nacional del SNTE; aal día siguiente, la líder del sindicato magisterial se entrevistó con funcionarios del gobierno del estado para tratar dos asuntos:
La forma de desarticular el movimiento magisterial disidente, lo cual en ese momento parecía imposible, y negociar que el distrito de Zacapoaxtla fuera para uno de sus hombres de mayor confianza, Guillermo Aréchiga Santamaría, quien fue secretario general de la sección 51 del SNTE, jefe de delegaciones del ISSSTE y ex diputado federal, primero por el PRI y luego se convirtió en legislador independiente cuando su jefa dejó el tricolor.
Todo indica que en el Poder Ejecutivo estatal se estaba de acuerdo en esa negociación y por eso se mandó al distrito de Zacapoaxtla a un candidato débil de parte del PRI, querido por pocos, famoso por sus escándalos de corrupción e ineptitud. óscar Aguilar parecía ir directamente al matadero.
Luego de ese acuerdo, en las siguientes semanas la disidencia magisterial se empezó a debilitar y fraccionar como resultado de que fue infiltrado por la CNTE un grupo radical –proveniente de Michoacán–, que lejos de construir ha causado intrigas y confrontaciones entre los miembros del Consejo Democrático Magisterial Poblano (CDMP).
Esa circunstancia abrió una brecha para que se fueran invirtiendo las prioridades. Cada vez avanzaron más las negociaciones entre la cúpula del SNTE y el gobierno del estado para golpear al CDMP, lo que a su vez fue relegando el tema del distrito de Zacapoaxtla.
Llegó un momento en el que quedó olvidado el asunto de hacer ganar a Guillermo Aréchiga, lo que fue aprovechado por el PRI y el gobierno para apuntalar a Óscar Aguilar y evitar que el tricolor pierda esa plaza.
Una de las mejores maneras en que ayudaron a Aguilar es que se incorporó a su campaña el actual diputado federal Wenceslao Herrera Coyac, quien hace tres años fue de los pocos priistas que ganó la elección de ese entonces y ejerce un fuerte liderazgo entre las comunidades indígenas del distrito, las cuales son la reserva de votos del tricolor.
La presencia de Herrera Coyac permitió contrarrestar el apoyo que Cupertino Alejo está dando a Aréchiga, el cual es importante, pero no del todo efectivo, ya que al ser identificado como alguien cercano a Elba Esther Gordillo Morales ya no tiene fuerza entre los profesores del distrito.
El miércoles estuvo de gira por el distrito el gobernador Mario Marín Torres, quien encabezó un acto que abarrotó la plaza principal de Zacapoaxtla, además de que entregó muchos beneficios, entre ellos una carretera.
La presencia del jefe del Poder Ejecutivo se ha entendido como un espaldarazo a Óscar Aguilar y la preocupación del gobierno del estado de que no se pierda el distrito.
Se sabe que en el gobierno ahora se parte de la idea de que ya se le permitió a Elba Esther Gordillo recuperar los edificios del SNTE y ante valores entendidos queda fuera el reclamo de la diputación de Zacapoaxtla. O por lo menos eso es lo que parece.
Guillermo Aréchiga ya causó un fuerte susto al PRI. Ha hecho una buena campaña y ha demostrado que es un candidato con fuerza. Que si hubiera tenido más tiempo y un mejor apoyo del SNTE podría haber ganado las votaciones.
Algunos políticos de Zacapoaxtla comentan que no se debe descartar la posibilidad de que el próximo 5 de julio el ex secretario general de la sección 51 del SNTE le dé un segundo susto al PRI, aunque parece difícil que pueda vencer a la estructura priista, desplegada en las comunidades indígenas.
Sin embargo, no se debe de quitar la atención sobre Zacapoaxtla el día de la elección, ya que el Panal podría dar una sorpresa.
La única en el estado, ya que el resto de sus campañas fueron desastrosas.