El ex rector de la Universidad Autónoma Nacional de México (UNAM), Juan Ramón de la Fuente Ramírez, afirmó que para frenar la violencia en el país y disminuir la brecha social que existe actualmente, es necesario impulsar un mejor modelo de desarrollo educativo, “responsable” y “real”.
Asimismo, afirmó que la educación superior mejora la calidad de la fuerza laboral, promueve el crecimiento económico, reduce la pobreza y contribuye a avanzar en materia de equidad. Ayer recibió el doctorado Honoris Causa por parte de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP).
“Una sociedad que no transmite conocimientos genera violencia, y aunque ciertamente el conocimiento no garantiza la paz social –de igual manera que la riqueza no garantiza el bienestar– el conocimiento es, sin duda, el mejor instrumento que tenemos para lograr la cohesión social, que puede impulsar una economía sustentada, un desarrollo sustentable y más parejo, menos desigual”, acotó.
Durante el acto protocolario que se realizó ayer en el Salón Barroco de la UAP, el ex rector de la UNAM aseveró que ante los rezagos que enfrenta México en materia de educación es necesario revisar el modelo pedagógico del sistema mexicano para “salir de los suburbios de la sociedad del conocimiento”.
“Los países que tengan más claras y mejor definidas estas estrategias serán los primeros en regresar al crecimiento económico, pero a uno que sea capaz de distribuir la riqueza entre muchos y no sólo de acumularla en unos cuantos. En nuestras manos está que México no se quede a la zaga, y que asuma su compromiso más decidido con la investigación, educación y cultura. Para eso están nuestras universidades públicas”, señaló.
Por ello se pronunció por diseñar estrategias más eficientes de educación para toda la vida y por crear un sistema mucho más transparente, con la ayuda de sistemas de evaluación que determinen si los estudiantes de todos los niveles aprendieron o no.
De la Fuente refirió que el panorama en México sobre educación no es del todo bueno, pues la tasa de ingresos es 18 por ciento más baja que la registrada en el este asiático, además que la tasa de egresos representa un 60 por ciento menos. “No se trata de entrar a la carrera para ver quién hace el pronóstico más estridente; más bien decirle a la sociedad las fórmulas que vayan más allá de las coyunturas y generalidades”, acotó.
El ex rector de la UNAM puntualizó que la universidad debe ser “el faro que alumbre” el retorno a la ruta del conocimiento y del desarrollo, por lo que resulta imperativo incrementar las inversiones en infraestructura educativa y científica, proveer al sector productivo de nuevos conocimientos y tecnologías, generar opciones educativas y programas de capacitación para quienes pierden el empleo, e identificar y apoyar proyectos con tecnologías sustentables desarrolladas en México.
Al inicio de su intervención, De la Fuente consideró que la UAP es considerada dentro de las primeras cinco instituciones a nivel nacional con mejores programas de posgrado, proyectos de investigación, vinculación con el sector productivo y transparencia.
“La UAP ha logrado avances estimables en el campo de las humanidades y, de manera sorprendente, en el de la difusión cultural, con sus nuevas instalaciones, que son orgullo no sólo de los poblanos, sino de todos los universitarios mexicanos”, indicó al hacer referencia al Complejo Cultural Universitario.
Además, el ex rector de la UNAM insistió en su propuesta para impulsar un plan nacional de universidades públicas contra el desempleo, a fin de emplear y capacitar con cursos y talleres a los egresados que no encuentren trabajo.
En su turno, Enrique Agüera Ibáñez aseguró que en México y en el mundo las universidades son parte importante de la construcción del país, aunque lamentó que en la actualidad la defensa de la universidad pública todavía esté sometida a la voluntad de la política mexicana.
El esfuerzo –dijo– se tiene que hacer desde las universidades, porque al final “no lo hacemos por el bien de nosotros, es por el bien del país”. Asimismo, recordó que las universidades públicas hacen su tarea permanentemente y le toca al gobierno hacer la suya; “sin las universidades es difícil vislumbrar un buen futuro”.
Al terminar la ceremonia, De la Fuente donó más de 12 mil artículos, revistas y libros al departamento de Psiquiatría de la Facultad de Medicina de la UAP, y anunció que regresará para dialogar con estudiantes y residentes sobre educación médica. Con esta donación el acervo bibliográfico se convierte en el más importante del área en la entidad.
