Los integrantes del movimiento magisterial poblano suspendieron las negociaciones con las autoridades de la Secretaría de Educación Pública (SEP) estatal, y advirtieron que intensificarán las protestas en contra del gobierno del estado, luego de que el titular de la dependencia, Darío Carmona García, descontó el sueldo a 2 mil maestros que suspendieron actividades para participar en las movilizaciones contra la Alianza por la Calidad Educativa.
El vocero de los profesores disidentes en el estado, Miguel Guerra Castillo, anunció además que los afectados recurrirán a los tribunales laborales para denunciar que los recortes se aplicaron de manera selectiva y sin fundamento jurídico.
En tanto, Carmona García se negó a fijar una postura sobre las amenazas de los educadores que integran el Consejo Democrático Magisterial Poblano (CDMP).
Desde que inició el conflicto magisterial en el estado, en agosto pasado, Carmona advirtió que descontaría el salario a los maestros que suspendieran clases para asistir a las protestas organizadas por el CDMP, las cuales incluyeron marchas masivas en la ciudad de Puebla, tomas de oficinas públicas y un plantón permanente en las oficinas de las secciones 23 y 51 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), las cuales se mantienen en poder de la disidencia desde hace cuatro meses.
La medida se hizo efectiva el viernes anterior para 2 mil docentes, a quienes les recortaron entre 500 y 4 mil pesos de la primera quincena de febrero.
Para los mentores disidentes, la sanción económica forma “parte de una escalada de golpeteo y sometimiento en contra de los maestros” que buscan la cancelación de la Alianza por la Calidad Educativa y la destitución de los dirigentes oficiales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación .
En un comunicado de prensa, que puede ser consultado en la página codemagisterialpoblano. blogspot.com, los docentes señalaron que la negativa del gobernador Mario Marín Torres a concederles audiencia desde diciembre pasado y la represión económica obliga a los maestros a endurecer su postura ante el gobierno estatal y federal.
En un contexto de crisis económica “golpear a los maestros en el bolsillo parece ser una provocación” que “no será bien asimilada”, afirmaron.
El sábado pasado, los dirigentes alternos de la sección 23 y 51 del SNTE, Gilberto Maldonado Maldonado y Juan Durán Martínez, respectivamente –designados el 5 de diciembre pasado luego de que los disidentes desconocieron a los líderes oficiales de la organización gremial–, encabezaron una reunión a la que asistieron los integrantes de los dos comités ejecutivos seccionales democráticos, donde acordaron las líneas de acción para revertir las sanciones económicas.
Miguel Guerra explicó que los dirigentes del movimiento cancelaron la mesa de negociación en la que los integrantes del CDMP se reunían con los directores de nivel de la Secretaría de Educación Pública para resolver trámites administrativos y denuncias laborales sin la intermediación de los dirigentes oficiales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación ; asimismo, afirmó, recurrirán a movilizaciones para exigir la devolución de los descuentos, entre las cuales se contempla la toma de oficinas de la SEP, ubicada en la zona norte de la capital en las inmediaciones de la Central de Autobuses Puebla.
“No queremos responder visceralmente, porque sabemos que es una provocación; quieren que golpeemos, pero obviamente hay bastante indignación y rechazo”, admitió.
El vocero del Consejo Democrático Magisterial Poblano anunció que este lunes definirán la estrategia jurídica que iniciarían en contra de las autoridades educativas por aplicar recortes de manera selectiva, pues a pesar de que en algunas manifestación participaron más de 20 mil maestros solamente fueron aplicados 2 mil descuentos.
