Los dirigentes en Puebla del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) someterán a revisión el contenido de la Alianza por la Calidad Educativa, “para adecuarlo a las necesidades del estado”. Sin embargo, reconocieron que no se acatarán las principales demandas de la disidencia magisterial, la cual mantiene en jaque al ala oficial desde mediados de octubre.
Cirilo Salas Hernández, secretario general de la Sección 51 del SNTE, advirtió que no habrá marcha atrás en su aplicación, en la obligatoriedad del Examen Nacional de Oposición para adquirir una plaza magisterial, ni se permitirá que los docentes hereden sus bases laborales.
En tanto, el secretario de Educación Pública (SEP), Darío Carmona García, se negó a manifestar ante los medios de comunicación su rechazo hacia la implementación de ese programa, pese a que la dependencia a su cargo se sumó a las secretarías de 12 entidades federativas que se opusieron a la Alianza el viernes pasado durante la 14 sesión plenaria del Consejo de Autoridades Educativas (Conaedu).
Además del repudio mostrado por los titulares del servicio educativo de Michoacán, Oaxaca, Chihuahua, Puebla, Guerrero, Zacatecas, Querétaro, Quintana Roo, Campeche, Veracruz, Chiapas, Coahuila y Morelos, el fin de semana se signó un acuerdo en esta último estado donde el gobierno estatal y el SNTE se comprometieron a modificar la Alianza a cambio de que la fracción disidente del magisterio termine con las protestas en esa entidad.
En ese contexto, el dirigente de la sección 51 del SNTE –que afilia al magisterio estatal poblano–, informó que la Alianza por la Calidad Educativa será revisada en Puebla a través de diversas mesas de trabajo, en las cuales participarán los integrantes del sindicato, así como las autoridades de la Secretaría de Educación Publica estatal.
Los integrantes del Consejo Democrático Magisterial Poblano, aclaró, podrán incluirse en los foros de análisis, siempre y cuando elaboren “una propuesta formal” cuya aplicación sea viable para el estado. “Si el asunto es la Alianza, ahí está, quieren aportarle pues que le abonen”, enfatizó.
Entrevistado en uno de los anexos de la Casa del Maestro Poblano, donde despacha desde que la fracción disidente del SNTE tomó las instalaciones de la sección 51 el pasado 21 de octubre, Cirilo Salas explicó que el análisis del pacto SEP–SNTE no realizará modificaciones, sino adaptará las líneas generales de acción a las necesidades del estado.
En ese sentido, Cirilo Salas se sumó a la postura del dirigente de la sección 23 del SNTE, Eric Lara Martínez, quien resaltó que no habrá marcha atrás en la implementación de ese programa nacional, pues es un acuerdo que no sólo avaló el gobierno federal, sino también las administraciones estatales.
