“Con las primeras acciones de resistencia civil pacífica y con el apoyo de muchos otros, inclusive, de aquellos con los que tenemos algunas diferencias, pero con los que coincidimos en la defensa del petróleo, hemos logrado alejar el riesgo del albazo legislativo. No olvidemos que querían, como lo hicieron con la Ley del ISSSTE, aprobar al vapor las reformas de Calderón sobre el petróleo. Pero la acción oportuna de nuestros legisladores y de las brigadas, lo ha impedido. Y es casi un hecho que no podrán, en este periodo de sesiones que termina el 30 de abril, aprobar las iniciativas entreguistas.

“Sin embargo, no podemos confiarnos. Sabemos cómo piensan y cómo actúan nuestros adversarios, pero sobre todo sabemos que es mucha su avaricia.

“Aquí quiero dejar en claro cuál es nuestra principal demanda en estos momentos. Lo que queremos es algo totalmente racional, pacífico y posible. Estamos exigiendo que se convoque a un debate nacional, plural y democrático con toda la sociedad. Un debate sin prisas, no simulado, abierto a todas y a todos los que tengan algo que decir. En el entendido de que el petróleo es de todos los mexicanos y, por lo tanto, todos tenemos derecho a opinar.

“Puede ser que los senadores y diputados tengan la última palabra, pero la primera palabra la tendrá siempre el pueblo de México.

“No podemos aceptar que algunos quieran robarse el patrimonio de todos los mexicanos, y mucho menos a espaldas del pueblo.

“Amigas y amigos:

“En tanto no haya respuesta a nuestra petición de que se lleve a cabo un amplio debate nacional sobre el petróleo y lo que implica en cuanto a soberanía, historia, legalidad, corrupción, desarrollo, bienestar y paz social, nosotros continuaremos con la resistencia civil pacífica”.

Andrés Manuel López Obrador, Presidente Legítimo de México,
discurso  pronunciado en la Asamblea Nacional Informativa para la Defensa del Petróleo,
realizada en el zócalo de la ciudad de México el domingo 13 de abril de 2008.

El mes anterior, en Querétaro, como consecuencia de una convocatoria publicada en internet, grupos de jóvenes agredieron a quienes se denominan emos; desde entonces, el término y la personalidad de esos chicos ha pasado al primer plano. Cientos de páginas en los periódicos, programas de radio o televisión han ido escudriñando el tema.

Así, por primera vez, muchos adultos, se conoció la existencia de este grupo de muchachos y muchachas que se caracterizan por tener períodos de tristeza extrema que en ocasiones, los lleva a atentar contra su vida.

Desde que se dio el primer ataque, han ocurrido varios más en distintas ciudades del país, la convocatoria persiste en la red y la palabra emo ha pasado a ser parte de las charlas cotidianas y se le aplica como calificativo a cualquier persona que muestre algún tipo de vulnerabilidad.

Materializado novedosamente por la internet, elemento socializante masivo que trasciende las distancias, el caso de los emos ha puesto en relieve una situación que persiste, me refiero al hecho de que nuestra sociedad tiene a la intolerancia como elemento común.

La intolerancia nos lleva a maltratar a todos los que sean diferentes y podemos manifestarlo con miradas agresivas, insultos, negativa al trato, imposición de condiciones y otras formas; es más, hasta se llega al homicidio. No solemos reconocer las diferencias como riqueza para la convivencia sino como elemento para descargar todo tipo de ofensas.

Vamos contra todos los que no sean normales, y no lo son todos los que no piensen o actúen como nosotros. Señalamos, segregamos, violentamos a los que tienen capacidades diferentes, homosexuales, indígenas, pobres, rurales, mujeres, cristianos, estudiosos, de lento aprendizaje, gordos, flacos, altos, de baja estatura, en general cualquier tipo de característica atípica.... con un etcétera hasta el infinito.

Cualquier individuo que haga comentarios distintos u opuestos a los personales debe, por lo menos, guardar silencio, de lo contrario escuchará descalificaciones o improperios de nuestra parte.

Es muy desafortunado que no podamos dejar de lado la intolerancia, porque ello incide en las decisiones familiares, vecinales, locales y nacionales. Entre otras cosas, la intolerancia nos lleva a tratar de conseguir los propios objetivos sin tomar en cuenta las opiniones que nos llevaran a tomar decisiones colegiadas que nos permitieran mejorar las condiciones de todos, incluyendo las minorías.

 Estas son las razones por las que creo, que en cuestiones de intolerancia, en uno u otro momento, todos somos emos. .

Según reporte de la Cuenta Pública de 2006, el rescate bancario tuvo un costo fiscal –es decir, de recursos que provienen de los impuestos que pagamos, algunos, ciudadanos–, de un billón 381 mil millones de pesos hasta 2006, monto equivalente al 15 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

Hasta esa fecha, se le había cubierto a la banca privada –90 por ciento extranjera– 793 mil 300 millones de pesos y faltaban por pagarle 677 mil 700 millones de pesos.

Fuente: Reporte de la Cuenta Pública 2006.

“De acuerdo con estimaciones del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados, en el periodo enero–marzo se recaudaron alrededor de 622.3 millones de pesos por concepto del nuevo impuesto a las gasolinas y el diesel en vigor desde el primer día de este año y que se aplicará en forma paulatina durante los próximos 18 meses.

“En efecto, aseguro Cristian Rodallegas, integrante de la Comisión Permanente de Funcionarios Fiscales que agrupa a todos los secretarios de Finanzas del país, desde enero de este año y hasta junio de 2009 se aplicará un aumento escalonado de 2 centavos por litro de gasolina Magna; de 2.44 centavos por litro a la gasolina Premium y de 1.66 centavos por litro de diesel vendido, hasta llegar a una tasa fija de 36; 43.92 y 29.88 centavos, respectivamente, con lo que se espera recaudar, una vez llegada a la meta, más de 22 mil millones de pesos”.

Cuando dios hizo el mundo, para que los hombres prosperaran, decidió darles dos virtudes:

A los ingleses, tenaces y estudiosos.

A los japoneses, trabajadores y pacientes, y así sucesivamente.

Cuando llegó a los mexicanos, dijo lo siguiente; “Estos van a ser inteligentes, honestos y panistas”.

Cuando termino de hacer el mundo, un ángel le dijo: “señor, has dado a todos los pueblos dos virtudes, pero a los mexicanos les has dado tres. Eso hará que ellos prevalezcan por encima de otros pueblos de la tierra”.

“Caramba, es cierto”, dijo el señor. “Pero los dones de dios no deben quitarse. Lo remediaremos de inmediato: los mexicanos conservarán esas tres virtudes, pero ninguno podrá ejercer más de dos virtudes simultáneamente”.

Es por eso que desde ese momento y por mandato divino:

1. El mexicano que es panista y honesto, no puede ser inteligente.

2. El que es inteligente y panista, no puede ser de ningún modo honesto.

3. Y el mexicano que es verdaderamente inteligente y honesto, jamás podrá ser panista.

Moraleja: nunca dudes, dios sabe lo que hace.