En el documento publicado en internet se lee: “A todos los departamentos y unidades administrativas: por instrucciones del licenciado Arturo Langdon Lagarrigue, delegado del Patronato para Asuntos de Rectoría, se les informa que la aplicación de las becas institucionales ha sido suspendida de forma temporal, ya que todas y cada una de ellas serán evaluadas y, en su caso, autorizadas por la oficina de la rectoría”.
“En el caso de las áreas que tienen asignados alumnos becarios, es necesario que les comuniquen que queda suspendido el apoyo que brindan a sus departamentos hasta nuevo aviso, por lo que no deberán presentarse a colaborar con su área”.
“Este tipo de becas serán evaluadas y, en su caso, autorizadas, una vez que cada departamento justifique la necesidad de contar con el estudiante becario; esta justificación deberá estar sustentada en proyectos y actividades de beneficio para la universidad, no autorizándose aquellas becas que estén destinadas a funciones administrativas o de mensajería”.
“Para lo anterior, adjunto a la presente encontrará el formato (dar click para descargar) que deberán llenar para justificar la asignación de los becarios, mismo que tendrá que ser llenado en los términos arriba mencionados. Cabe hacer mención que la no presentación de esta justificación ocasionará la pérdida de las horas de becas asignadas a su departamento. Dicha información deberá ser remitida a la Subdirección de Financiamiento Educativo de forma electrónica al correo: [email protected], el día lunes 21 de enero de 2008 a más tardar a las 18 horas”.
El documento está firmado por Juan Carlos Morales Páez, director de Planeación y Servicios Institucionales; Marco Antonio de Castilla Rivera, jefe de Auditoría; y José Ruperto Cervantes Rosales, coordinador de Personal.
Sobre el rumor y la incertidumbre que generó dicha información entre los estudiantes de la UDLA, la Vicerrectoría Académica aclaró, a través de la dirección de Comunicación Institucional, que ningún alumno becado perderá el apoyo financiero que recibe para continuar con sus estudios.
María López explicó que el objetivo de las autoridades de la UDLA es reestructurar a los becarios, reasignándolos a oficinas y escuelas afines a su carrera, pero que nadie perderá la beca y que se trata de una mala información interna.