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Alfonso Othón Bello Pérez, diputado federal del PAN, anunció que el gobierno del estado obtendrá alrededor de 4 mil millones de pesos extraordinarios producto del impuesto del 5.5 por ciento a la gasolina.

De acuerdo con el documento de la reforma fiscal, se tiene que del “fondo general de participaciones”, la partida subirá casi 15 por ciento. En 2007 llegaron de la Federación a Puebla 10 mil 190 millones de pesos, mientras que para el otro año serían 12 mil 117 millones de pesos.

En el “fondo de fomento municipal” se tendrán 12.35 por ciento más. De 699 millones de pesos pasará en el año 2008 a 813 millones de pesos.

Del “fondo de aportaciones para el fortalecimiento de las entidades federativas”, Puebla verá un aumento del 17 por ciento. Este año recibió 788 millones de pesos y el próximo llegarán 957 millones de pesos.

Bello Pérez detalló que al sector educativo se destinarán alrededor de 2 mil millones de pesos más, por lo que convocó a los gobiernos priistas a compartir dicho “costo político” con el PAN, pues serán ellos los más beneficiados con el alza en la gasolina.

Ante la partida extraordinaria, sin etiquetar que estará a disposición del gobernador Mario Marín Torres, el legislador federal hizo un llamado para transparentar el uso de los recursos, actividad para la que ordinariamente no tiene voluntad.

El panista criticó que el titular de la Comisión para el Acceso a la Información Pública (CAIP), Antonio Juárez Acevedo, haya mentido sobre sus labores como secretario de una agrupación política nacional, a sabiendas de que estaba impedido por la ley para ocupar dicho cargo.

Lamentó que justamente la oficina encargada de hacer cumplir la Ley Estatal de Transparencia y Acceso a la Información Pública esté envuelta en un escándalo que le resta credibilidad ante todos los ciudadanos; por ello, dijo, la fracción parlamentaria del Partido Acción Nacional seguirá pugnando para que la Auditoría Superior de la Federación intervenga en las cuentas de Marín Torres, especialmente ahora que están las campañas electorales.

Aseguró que en su partido no siguen las prácticas priistas y que no se puede acusar a las delegaciones federales de operar a favor del blanquiazul, pues se está disminuyendo su presupuesto para enviarlo a los gobiernos estatales.