CUITLATLÁN

El desencanto del presidente de la CAIP

Fermín Alejandro García

Por la tarde de este lunes, el presidente de la CAIP, Antonio Juárez Acevedo, fue citado en las oficinas del presidente del Congreso, Pericles Olivares Flores, quien le pidió una explicación de las informaciones difundidas acerca de que viola la ley del organismo al ser dirigente de la asociación política nacional Plataforma 4. El funcionario enmudeció. Se quedó sin argumentos.

Esa falta de respuestas del presidente de la CAIP llevó a que, el mismo lunes por la tarde, se decidiera por parte de la fracción del Partido Revolucionario Institucional dejarlo solo y tal vez permitir su posible destitución, si es que así se da línea desde la Secretaría de Gobernación.

Antonio Juárez Acevedo en su cargo de presidente de la CAIP se ha caracterizado por ser timorato y un consejero progubernamental, incluso con mayor énfasis que su antecesor en el cargo, Roberto Díaz.

Esos rasgos de su personalidad en nada le ayudaron para que alguien saliera defenderlo. Se sabe que el único que estaría dispuesto a meter las manos por él es un alto dirigente del PRI estatal, quien lo protege debido a que es compadre del padre de este servidor público.

Trascendió que como resultado de la reunión del lunes en el Congreso, es que se le dio un ultimátum a Juárez Acevedo para que a más tardar este miércoles, antes de que anochezca, presente pruebas que lo pudieran deslindar de Plataforma Cuatro, una agrupación con fuertes vínculos con el Partido Revolucionario Institucional.

Ante ese escenario, un comentario generalizado que surgió ayer en el Congreso es que la única salvación que podría tener Antonio Juárez es que un notario público corrupto le extendiera una carta con una fecha anterior en la cual el presidente de la CAIP fingiera que hace tres años había solicitado separarse de Plataforma 4 y por tanto, no estaba imposibilitado para buscar un puesto en la Comisión para el Acceso a la Información Pública.

Sin embargo se antoja como imposible esa supuesta salida.

Sobre todo cuando se sabe que el Partido Acción Nacional está dispuesto a irse a fondo para buscar la destitución de Antonio Juárez Acevedo.

Aunque salve el pellejo, el presidente de la Comisión de Acceso a la Información Pública es visto y valorado por muchos como un hombre de comportamiento torpe, ya que es inaudito que haya supuesto que podía engañar a todos y que nadie se daría cuenta que seguía siendo secretario técnico de Plataforma Cuatro.

Aunque también lo ocurrido deja mucho de que hablar de los legisladores del Partido Revolucionario Institucional, que no se dieron cuenta de todos los antecedentes de este nefasto personaje.