En Totimehuacán y Chiautla exigen apoyo a la Comuna y al estado tras lluvias de tres días

Javier Puga Martínez

Incuantificable es el número de las familias damnificadas que dejaron las fuertes tormentas de los últimos tres días en el sur de la capital poblana, concretamente en las juntas auxiliares de San Francisco Totimehuacán y Santo Tomás Chiautla; tan sólo en las colonias Artículo Primero y Santa Catarina son más de 200 los perjudicados luego de que los techos de cartón de algunas viviendas colapsaron y llenaron de lodo y agua aparatos electrónicos y artículos personales. Aún quedan siete colonias que también están demandando apoyos, sin que se conozca el número de personas que los necesitan.

En la imagen, viviendas de los vecinos de la colonia Artículo Primero, donde sus techos de cartón se cayeron luego de las fuertes lluvias que cayeron durante los últimos días / Foto: José Castañares

Aunque las direcciones de Protección Civil del ayuntamiento de Puebla y del gobierno del estado intervinieron desde el lunes por la noche en la zona, y aseguraron que ya habían entregado apoyos consistentes en despensas, colchonetas y cobijas a las personas que realmente lo necesitaban, hasta las 2 de la tarde de ayer unas 100 mujeres y hombres, en su mayoría madres solteras y de la tercera edad, seguían esperando las láminas que fueron prometidas para tapar los techos.

Las mujeres, integradas en la agrupación “Mujeres por un futuro mejor”, así como la “Unión de Colonias Revolucionarias Independientes”, ambas afiliadas al Partido Revolucionario Institucional (PRI), sostuvieron que hasta después de 36 horas continuaban sin ningún apoyo para reconstruir sus viviendas. Sólo la noche del lunes algunas cuantas familias recibieron unas despensas, colchonetas y cobijas.

“Así es, nos dieron ese apoyo mínimo, ¿pero a dónde chingaos quieren que pongamos esas colchonetas si todo esta bien mojado? Mire mi casa, está hecha un lodazal”, señaló una indignada vecina de la colonia Artículo Primero durante un recorrido realizado por La Jornada de Oriente.

Por otra tarde, la Secretaría de Gobernación del municipio de Puebla llegó a la zona para entregar las tan esperadas láminas, pero el personal encabezado por Javier Casique Zárate sólo llevó 50 paquetes del material, que resultó insuficiente para todas las familias que lo requieren.

Ciudadanos rebasan a la autoridad

La tormenta que azotó el martes a la capital poblana vino a agravar las condiciones en que quedó casi un centenar de familias de cinco colonias de Totimehuacán; a éstas se sumaron otras cuatro demarcaciones de Chiautla, San Marcos, El Pedregal, Santa Anita y Belén, que se unieron a los vecinos de Artículo Primero para obtener alguna ayuda, pues dicen que tampoco han sido atendidos por las autoridades.

Por esa razón, un grupo de mujeres tuvo que improvisar un albergue en la casa de uno de los vecinos, donde unas 15 de las 46 familias más afectadas tuvieron que pasar la noche. El resto se repartió entre las casas de otros colonos que apoyaron la labor.

Fueron ellas las que cooperaron con cantidades de 10 y 20 pesos para alimentar a casi 250 personas. En la elaboración de cenas y desayunos se fueron algunas de las 70 despensas que el DIF estatal repartió en el lugar. El alcalde de la junta auxiliar de Santo Tomás Chiautla, Pergentino Meneses Galaviz, aportó 200 pesos para la alimentación; el ayuntamiento y el gobierno del estado, nada.

“Tuvimos que formar el albergue porque el gobierno nos dio un apoyo, pero fue mínimo; por parte del municipio no nos dieron lo que esperábamos; ellos dijeron a los medios que nos trajeron despensas, y no fue verdad. También nos prometieron que ayer, a las 5 de la tarde, estarían las láminas, y tampoco. Mire, las personas cenaron, almorzaron y ya van a comer otra vez aquí afuera, y no han recibido nada”.

En efecto, casi un centenar de personas estuvo haciendo fila desde la tarde del martes a partir de las 7 de la mañana en espera de ayuda. Las mujeres solicitaron la ayuda del Ejército Mexicano para limpiar las casas anegadas y colocar las láminas, pues ellas mismas no podrían hacerlo de manera adecuada.

La colonia de mujeres

Las mujeres de Artículo Primero viven de lavar ajeno, hacer la limpieza en hogares, vendiendo productos casa por casa o dulces en la calle, o son obreras. Los pocos hombres que allá habitan, si no son de la tercera edad, trabajan como auxiliares de albañiles, fontaneros o recolectores de basura o empleados en comercios cercanos. Las mujeres, todas, tienen de uno a cuatro hijos y algunas se hacen cargo hasta de sus nietos.

Como en el caso del derrumbe de San Miguel Eloxochitlán, las lluvias dejaron al descubierto la pobreza y la miseria en que viven las mujeres de este lugar, mismas que están por doquier: niños con visibles problemas de alimentación deambulan y corren por las calles, mientras que algunos adultos exhiben al sol las infecciones que tienen en la piel o la pierna lastimada.

No importa que, por el contrario, una mujer tenga que ocultarse de la luz solar por un grave problema en la epidermis; lo importante es obtener un apoyo para volver a tener un lugar “seguro” donde pasar la noche.

Las mujeres afirman que sobreviven con unos cuantos pesos al día. Algunas casas tienen tal cantidad de basura y materiales de desperdicio que resulta difícil caminar por ellas. Pero cuesta trabajo reconocer la realidad en la que se vive: “Sí, algunos tienen mucha basura, pero hasta a las casas más bonitas, las que siempre están limpias, también se les cayó su techo”.

Hay tantos perros y gatos como número de gente en las casas; las mascotas también padecen, y muchos de ellos presentan enfermedades en la piel. Comen lo que pueden, como aquellos dos canes que con una avidez inaudita devoran dos tortillas duras.

Apenas hace una semana, el gobernador Mario Marín estuvo por una de las calles de esa colonia. Puso en marcha la pavimentación de una calle de apenas 200 metros de largo y que no es la principal, la que realmente lo necesita. Sólo dio el banderazo de salida a la maquina que empezó a remover piedra y tierra, pero una vez que finalizó el acto protocolario, el gobernador, la máquina y los trabajadores se fueron para no volver más.

Antes de desaparecer la maquinaria rompió las mangueras, que no tubería, con las que el Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Puebla (SOAPAP), lleva agua potable a la colonia, por lo que miles de litros se han desperdiciado sin que nadie, ni los vecinos, hagan algo al respecto.

Calles más arriba, un poste de luz es la única fuente de energía que abastece a decenas de casas aledañas por medio de infinidad de cables que salen de un sólo punto que han dejado inclinado el poste. Cuando llueve, del lugar comienzan a salir humo y chispas por el contacto directo del agua con la energía eléctrica, lo que pone en peligro a la población.

“Estamos cansadas de vivir esta situación, buscamos la mejoría de nuestra colonia. Alguien tiene que sujetar las riendas y gestionar el apoyo que necesitamos. Queremos la mejoría de nuestra colonia, nuestra superación como mujeres, queremos ser diferentes”, afirmó quien se autodenominó líder de la agrupación “Mujeres por un futuro mejor”.

A pesar de ser una organización priista, lamentó que ni Enrique Doger, ni Mario Marín han dado un apoyo real a una colonia que ha votado por el PRI desde hace más de 20 años.

“Cada año vienen a pedirnos el apoyo para los candidatos del PRI, pero cada año vienen las desgracias. Lo entendemos, pero también queremos obras para nuestra colonia, porque estamos muy abandonados. Si (los gobernantes) pueden darse una vuelta por aquí podrán ver las condiciones reales en las que viven muchas de nuestras familias”, recalcó

Algunos más se cooperaron con varios metros de hule que contuvieron por algunas horas la caída de agua del martes, pero tampoco resistieron y las familias tuvieron que abandonar sus casas e ir al albergue temporal.

“Llevo cinco años; nunca había vivido algo similar; fue muy difícil pasar la noche porque otra vez tuvimos que sacar el agua, vea todos los zapatos y la ropa, están bien mojados. Pero aquí nos quedamos a dormir, todos mojados. Más que nada por nuestras cosas, que tenemos poquitas, pero son nuestras y nos han costado muchos años de esfuerzo tenerlas”.

Aseguraron que la ayuda fluye a cuenta gotas: mientras a algunas les prometieron dar una o dos pacas de láminas. A una señora de 71 años, con visibles problemas para caminar, le dijeron que no podían darle ningún apoyo por que su credencial de elector tiene una dirección de la zona norte de la ciudad, aunque su casa, la que dijo que habita desde hace cinco años junto con sus nietos, no tiene techo porque no soportó el peso de la granizada del lunes.

Zona de riesgo

Las propias vecinas reconocen que viven en una zona de riesgo, pero ese es el único patrimonio y que por ningún motivo lo van a abandonar. Relataron que hace 20 años llegaron los primeros colonos, pero hace más de 12 años el señor Juventino Rosas, eterno aspirante a la presidencia auxiliar de San Francisco Totimehuacán, fraccionó el cerro en donde se ubica la colonia Artículo Primero, vendiendo los predios en diferentes cantidades.

Fue el mismo Juventino Rosas quien “autorizó” a la constructora que edificó las casas de interés social de La Guadalupana, a unos metros de ahí, extraer cientos de toneladas de arena de una ladera del cerro, dejando el terreno endeble y con riesgo de que se desgaje sobre una decena de casas, señaló Margarita Sainos, vecina del lugar que acompañada de otras colonas solicitó a la Comuna levantar un muro “que evite una desgracia”.

Por la tarde, un comunicado del ayuntamiento de Puebla informó que 190 familias de las juntas auxiliares de San Francisco Totimehuacán y Santo Tomás Chautla fueron apoyadas luego de las fuertes lluvias.

Ahí se informó que Ramón Balderas Ruiz, titular de Protección Civil municipal, explicó que ante la lluvia atípica con granizo, misma que tuvo una duración de 35 minutos aproximadamente, acudió a una brigada de primer contacto que, al realizar un análisis preliminar de la situación, reportó viviendas afectadas en sus techos, motivo por el que se proporcionaron apoyos con 40 cobertores y 30 colchonetas para 26 familias.

El titular de Protección Civil municipal destacó que, al fijar las líneas de acción y evaluación en el Puesto de Mando Unificado, se estableció contacto con personal de Sedesol, Pretrade y la Jurisdicción Sanitaria No. 6, paran iniciar las tareas de saneamiento de agua y búsqueda de casos epidemiológicos, mismos que no reportaron brotes.