El edil de Zapotitlán pagó 10 mil pesos de fianza y salió libre

Miguel Ángel Domínguez Ríos

Tehuacán– Mario Onésimo Fuentes Pacheco, presidente municipal de Zapotitlán Salinas, salió libre luego de pagar una fianza de 10 mil pesos, lo que generó inconformidad de pobladores de ese municipio y de la familia de Enedino Castillo, quienes consideraron que el alcalde movió sus influencias en la capital del estado.

Luego de la detención de Mario Fuentes Pacheco, quien pasó la noche en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Tehuacán, la Juez Segundo de lo Penal, Idalia Arciniega, determinó que el alcalde saldría libre previo pago de una fianza de 10 mil pesos.

Fernando Brito Aspiri, ex coordinador de la agencia del Ministerio Público en esta ciudad, fue el encargado de depositar el dinero en su calidad de abogado defensor del detenido, cuya liberación provocó que una treintena de pobladores de Zapotitlán se manifestara en las afueras del Cereso.

Mario Onésimo Fuentes fue detenido para responder por las acusaciones de robo calificado y lesiones en contra de Enedino Castillo, de 68 años de edad, quien señaló al alcalde como la persona que el mes pasado le arrebató el sobre de su quincena y además lo agredió físicamente.

Los inconformes expresaron que la liberación del detenido se debe a que “tiene influencias en el estado con diputados”, y pidieron que las autoridades penales investiguen a fondo para sancionar al presidente municipal.

Hubo momentos de tensión durante el tiempo que se esperó la salida del alcalde, pues en torno al penal se concentró el grupo inconforme donde estaba también la familia de Enedino Castillo, pero muy cerca de ellos se apostaron familiares del detenido.

Nicolás Castillo Reyes, hijo del afectado, señaló que “sería ilógico que lo suelten, sería indebido, pero sabemos que está bien relacionado”; además, denunció que a raíz de la denuncia que interpuso su padre la familia fue objeto de constantes amenazas por parte de parientes y amigos del munícipe.

“Si ya cometió un error o ya cometió una falta, que pague”, señaló, al tiempo de expresar que cuando un ciudadano común llega a agredir a un funcionario público la justicia resulta mucho más rápida.

Por su parte, el abogado defensor expresó que “se ha justificado de manera plena con pruebas bastantes, suficientes y jurídicamente válidas que la imputación que realizan contra el presidente municipal de Zapotitlán Salinas es totalmente ajeno a la realidad”.

Sostuvo que la fecha y hora en que el agraviado dice que ocurrieron los hechos, Fuentes Pacheco “se encontraba en sesión pública de cabildo, rindiendo su informe de actividades correspondiente al año pasado”.

A decir Brito Aspiri, la denuncia lleva en el fondo la intención de causar un perjuicio a la trayectoria política de su cliente, y consideró que “el Ministerio Público fue sorprendido (...); desde mi punto de vista muy personal yo siento que la averiguación previa fue integrada de una manera muy al vapor”.

Indicó que el agente investigador del MP sólo recabó la declaración del denunciante junto con la de dos testigos y un dictamen médico, con lo cual se consideró suficiente para poder consignar la averiguación.

Más de tres horas después de que se había cubierto la multa se indicó que el edil ya había abandonado las instalaciones del Cereso, razón por la cual los inconformes se retiraron del lugar pese a que nadie vio a Mario Fuentes salir por la puerta principal. (Elizabeth Rodríguez Lezama)